Murió Lona, el juez cómplice de la dictadura que nunca estuvo preso

Ricardo Lona fue acusado de ser partícipe de la Masacre de Palomitas. Como juez en aquellos tiempos no investigó el secuestro y desaparición del ex gobernador MIguel Ragone. Tampoco investigó las denuncias de desapariciones y torturas realizadas por presos políticos y familiares, la causa conocida como "627", que reúne a 78 víctimas. Ayer murió.

En 2019 avanzó la causa Ragone y el ex juez fue condenado a 15 años de prisión en calidad de partícipe secundario del homicidio. También fue condenado por encubrimiento y prevaricato. Pero apenas meses después la Sala II de la Cámara Federal de Casación Penal, anuló la condena como participe homicidio y solo ratificó la condena por los otros dos delitos.

Fue el único juez federal en la provincia durante los años de la dictadura. En 1984, ya en democracia, fue ratificado en el cargo por el Senado de la Nación, hasta 1993, consigna una nota de la periodista Elena Corvalán en Página 12.

Pese a las tres acusaciones en su contra con contundentes pruebas Lona siempre obtuvo el beneficio de la prisión domiciliaria. "La injusticia amiga acudió en su rescate para que no sea efectivo el castigo", afirmaron después de conocerse su muerte, la organización Hijos Salta.