Planificó su fiesta de jubilado y murió en el último día de su laburo

El caso Michele Barco, de 59 años de edad, ha conmocionado a propios y extraños, luego de que falleciera en su último día de trabajo. Los hechos sucedieron en una empresa de Padua, Italia.

Michele Barco, iba a celebrar este 31 de enero su último día de trabajo, pues a partir de febrero sería un hombre jubilado tras más de tres décadas de esfuerzo. Incluso, Michele había planeado toda una despedida, pues había llevado botellas de vino para brindar y un pastel para compartir un momento tan especial con sus compañeros.

Dentro de la empresa en la que laboraba, Michele se desplomó ante la mirada y preocupación de todos sus compañeros, quienes rápidamente trataron de auxiliarlo y marcar al número de emergencias, sin embargo, el hombre perdió la vida por un aparente ataque al corazón, detalló Clarín.

Rinden homenaje para Michele Barco

Lo que debía ser un día de celebración y de buen ambiente, se convirtió en una tragedia, luego de la repentina muerte de Michele Barco en su último día de trabajo. Había dedicado 30 años de su vida a la empresa y hasta el final de sus días fue un hombre comprometido.

Dentro de la empresa que laboraba, la conmoción se apoderó de los pasillos y se suspendieron las labores durante este 31 de enero. Según los reportes, se rindió una especie de homenaje silencioso a una persona a la que todos conocían y respetaban.

De Michele Barco se sabe que era un hombre soltero, jamás se casó y tampoco tenía hijos. Vivía con su madre en Piazzola y falleció a los 59 años de edad, en un día en el que debía ser el centro de atención, de las risas, de los aplausos y de la nostalgia por su despedida tras 30 años trabajando, pero nadie se imaginó nunca que también sería el último día que lo verían con vida.