Tremendo

¿Vuelve el impuesto a las ganancias?: Milei prepara un DNU y un paquete de reformas

Políticos, economistas y empresarios analizan en un borrador los lineamientos técnicos de un proyecto del Poder Ejecutivo.

El Gobierno del presidente Javier Milei está culminando una serie de reformas más profundas que las anunciadas inicialmente, tras haber implementado 10 medidas de "urgencia" que incluyeron una fuerte devaluación y la instauración de un protocolo anticortes por protestas.

 Se preparan para desplegar un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) con desregulaciones y un extenso paquete de leyes conocido como "ley ómnibus", que se denominó internamente como "varias combis".

Este conjunto de medidas está siendo gestado por Milei y su círculo íntimo, incluyendo a la secretaria general de Presidencia, Karina Milei, el asesor estratégico Santiago Caputo, y el jefe de Gabinete, Nicolás Posse. Colaboradores externos, como el expresidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, también participan en estas iniciativas.

Estas reformas abarcan tres ejes principales: económico, estatal y político. En el ámbito económico, se plantean modificaciones en el régimen impositivo, como la reposición de Ganancias para ingresos a partir de $970 mil, un blanqueo de capitales con una multa del 5%, nuevos planes de pago para deudores, y un incremento en las retenciones a productos del agro, entre otras. En el sector jubilatorio, se propone eliminar el actual sistema de movilidad para pasar a aumentos discrecionales por decreto.

Por otro lado, en el ámbito estatal, se busca revisar los contratos con universidades y exigir presencialidad en los lugares de trabajo de la administración pública, con la intención de reducir un 10% de los empleados estatales. Además, se plantea una revisión de bienes, presupuestos y gastos, con la intención de recortar gastos y una revisión sobre el sistema de categorías y ascensos en la administración pública.

El último eje está centrado en una reforma política que incluye la eliminación de las PASO, el uso de la Boleta Única y una revisión del sistema de partidos políticos. Todo esto apunta a un objetivo común: reducir el déficit fiscal.

Estos planes generarán una fuerte tensión política y social, con negociaciones con gobernadores, la oposición, y la ciudadanía en medio de una escalada inflacionaria y la búsqueda de nuevas directrices en materia de salarios, tarifas y precios.

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