La "bestia peluda" que apareció en Salta y provocó pánico hasta en la Policía

Criaturas que aparecen de golpe entre nosotros y luego huyen sin dejar rastro son protagonistas de historias de antaño que causan temor cada tanto en Salta. En el episodio de este domingo en nuestra sección dedicada a eventos "extraños" en la provincia hablaremos de la "bestia peluda" que hizo entrar en pánico a salteños incluidos policías. 

En abril del 2003, al menos 14 testimonios dieron cuenta de la misteriosa aparición en la zona de Rosario de la Frontera. La causa judicial se abrió a principios de marzo del 2002. 

El dato más significativo, pero nunca pudo comprobarse, lo aportaron el comerciante Raúl Torres y el docente Hugo Rodas, quienes le contaron al jefe de los Bomberos Voluntarios, José Exequiel Alvarez, que en El Duraznito hallaron a la vera del camino un gran animal muerto que parecía haber sido atropellado. 

"Se bajaron para ver qué era, lo dieron vuelta con un palo y se sorprendieron: nunca habían visto algo semejante. Tenía garras descomunales, brazos como los de un hombre, un metro cincuenta de altura, hocico de oso, colmillos enormes y genitales exactos a los de un humano masculino", le dijo Alvarez al diario El Tribuno, en ese entonces. 

El primer comentario, que fue el que dio inicio a la investigación, fue aportado por una pareja que estaba en la zona boscosa de Arroyo Salado, conocida también como "villa cariño". Ellos describieron a un animal similar al supuestamente hallado muerto, pero de mayores dimensiones.

Pese a numerosas excursiones en la zona, la criatura nunca pudo ser hallada.