Murió la hija de un queridísimo actor: la encontraron dentro de su departamento

El ambiente artístico se estremece ante la triste noticia del fallecimiento de Anahí Rizzo, la hija mayor del reconocido actor Raúl Rizzo. La joven de 34 años fue hallada sin vida en su departamento del barrio porteño de Constitución el pasado jueves por la noche.

Anahí se encontraba en compañía de su pareja cuando empezó a experimentar dificultades para respirar, seguido de vómitos y, finalmente, sufrió un paro cardíaco. A pesar de los esfuerzos del equipo de emergencias médicas que acudió al lugar, no fue posible salvarla, y los profesionales confirmaron su fallecimiento.

La pareja de Anahí fue quien alertó a las autoridades y solicitó asistencia desesperadamente. La Policía de la Ciudad, la Comisaría Vecinal 1D, y la Fiscalía Criminal N°28 intervienen en el caso, tratándolo como una "muerte dudosa", según informes de Noticias Argentinas.

Anahí Rizzo Quinteros, hija de Raúl Rizzo y la actriz Isabel Quinteros, era una reconocida militante de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y desempeñaba funciones en el Servicio de Conciliación Laboral Obligatoria (SECLO). Sus compañeros de ATE expresaron su dolor y despedida a través de un emotivo posteo en Instagram, recordándola como una compañera indispensable y valiente en la lucha cotidiana.

El comunicado de ATE destaca el compromiso de Anahí en la defensa de los derechos laborales, su participación activa en la Comisión de Despedidos/as, y su valentía durante la lucha por la reincorporación de los trabajadores despedidos en 2016. Aunque señalan las razones clínicas de su partida, subrayan el contexto vivencial de angustia que atravesaba, reflejando el pesar que afecta al pueblo en medio de la incertidumbre y los ataques a los trabajadores.

La prematura pérdida de Anahí Rizzo deja un vacío en la comunidad artística y en el movimiento sindical, recordándola por su sensibilidad, compañerismo, y su alegre rebeldía frente a los momentos más difíciles. La Junta Interna ATE-Trabajo se despide con un "hasta la victoria siempre", prometiendo fortalecer su lucha en su memoria.