Susto total en el cementerio de la Santa Cruz: "Se escapó y lo estamos buscando"

Algo extraño ocurrió en la madrugada del 18 de mayo. Entre susurros y portones que crujían, Homero -el can que patrulla el cementerio SantaCruz con más celo que un sereno nocturno- se evaporó sin dejar huellas. La última pista lo sitúa merodeando el parque SanMartín, a pocos pasos de la Terminal de Ómnibus. Después, nada: ni ladrido, ni pelo, ni sombra.

Los floristas aseguran que las rosas marchitan más rápido sin su olfato inspector. Los cuidadores se quejan porque ya nadie les roba el mate. Incluso los residentes eternos parecen inquietos: hay quien jura haber oído un lamento nocturno clamando "devuélvanme a mi perro".

Quien lo vea debe comunicarse al 3876000616. Difundí la búsqueda cada vez que abras redes sociales, contale al kiosquero, avisale a tu tía curiosa y, por las dudas, al fantasma del barrio. Con un poco de humor y mucha solidaridad, hagamos que Homero vuelva a custodiar sus lápidas favoritas y a espantar la tristeza.