En pleno desalojo mataron a la tía de niña wichí: por fin volverá a su comunidad

A los seis años una pequeña permaneció institucionalizada en un hogar estatal tras sufrir un desalojo que le costó la vida a su tía abuela con quien se estaba criando. Estuvo en el lugar hasta la semana pasada alejada de su comunidad y cultura.

Nueve años después pudo volver a reunirse con sus familiares. La adolescente quedó bajo la tutela de sus tíos paternos tras legalizarse su situación. Ella es parte de la comunidad Weenhayek El Quebracho, ubicada en el kilómetro 5 de la ruta nacional 86, en el municipio de Tartagal.

El hecho de violencia ocurrió el 7 de diciembre de 2014. La Policía llegó a tomar la población cuyo territorio de 95 hectáreas se encuentra en disputa aún hoy con la titular registral, María Monserrat. "Ya habían ido una vez a decirnos que nos desalojaban. Pero ese día nos entregaron la nota adentro y empezaron a destrozar todo", contó Isaías Fernández, cacique de la comunidad. 

Resistieron alrededor de 13 horas al desalojo que los dejó al costado de la ruta, informo Salta 12. La niña había llegado dos años antes para quedar a cargo de Ana Pérez, tía del padre de la niña, quien falleció. Su madre se encontraba en situación de consumo por lo que decidió dejarla al cuidado de la familia paterna.