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Ante la suba de precios, la venta de pan cayó entre un 25 y 30% en Salta

Las pequeñas panaderías luchan por sobrevivir, mientras que la falta de medidas impositivas y el encarecimiento de los servicios complican aún más la situación.

El consumo de pan ha experimentado una significativa caída en Salta, con una reducción de entre el 25% y el 30% en las ventas, según alertó Daniel Romano, presidente de la Cámara de Panaderos de la provincia. La crisis que atraviesa el sector se debe a una combinación de factores, entre los que se destacan la pérdida de poder adquisitivo de los salteños, el aumento constante de los costos de producción y el impacto de las altas temperaturas del verano sobre el consumo.

Romano explicó en Radio Salta que las panaderías atraviesan un momento crítico, con subas constantes en insumos como la margarina y la levadura. La margarina ha registrado tres aumentos en lo que va del año, acumulando un 16% de incremento, mientras que la levadura ha pasado de costar 8.000 pesos a cerca de 50.000 pesos. A pesar de la caída de los precios de la harina, debido a la reducción de exportaciones y una alta oferta interna, los aumentos en otros insumos y servicios siguen afectando gravemente al sector, así lo publicó El Tribuno.

En particular, el precio de los servicios como la electricidad ha subido de manera desmesurada, con un aumento superior al 500% desde diciembre. "Pagábamos 300.000 pesos en diciembre y hoy estamos pagando 1.500.000", denunció Romano, quien también mencionó que las tarifas del agua han subido más del 40%. A pesar de esta situación, señaló que no se percibe una queja generalizada entre la población.

Las pequeñas panaderías son las más afectadas por este panorama. Muchas de ellas, al ser negocios pequeños con una producción limitada, se ven obligadas a cerrar rápidamente debido a los altos costos y la caída del consumo. "Las panaderías más pequeñas, que abren con mucho esfuerzo, terminan cerrando a los pocos meses por estas circunstancias", lamentó el dirigente panadero.

Romano también destacó la falta de medidas impositivas que alivien la situación de las PYMEs del sector. A pesar de que se considera que las panaderías generan el 80% del empleo en la provincia, no ha habido ninguna baja en los impuestos, y los intereses por deudas con la AFIP alcanzan el 7% mensual, lo que en términos anuales equivale a un 84% de deuda.

Por último, el presidente de la Cámara de Panaderos explicó que ya no existen precios referenciales para el pan, ya que cada panadería decide los precios de forma independiente. Esto ha dado lugar a una gran disparidad en los costos del pan, que pueden variar entre 1.000 y 4.000 pesos, dependiendo del establecimiento. "La gente tiene que caminar y buscar", concluyó Romano, quien destacó que el sistema ya no es el mismo de antes, con precios estandarizados.

En resumen, el sector panadero de Salta enfrenta una situación muy compleja, donde la combinación de altos costos, caída en el consumo y falta de apoyo impositivo ha generado una crisis difícil de sobrellevar para muchas panaderías, especialmente las más pequeñas.

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