Desaparecieron de Gendarmería 15 'paquetes' que eran del narco Delfín Castedo

Cinco gendarmes fueron detenidos después de que se descubrieron que desaparecieron 15 ladrillos de cocaína de un depósito del Escuadrón 63 "Zárate Brazo Largo" de la Gendarmería Nacional Argentina. 

Èstos ladrillos de cocaína tenían un alto grado de pureza y formaban parte de un cargamento de 25 ladrillos que se habían incautado en un operativo realizado el 23 de junio pasado, en Orán y sus paquetes tenían el sello de un delfín, la marca del narco Reinaldo Delfín Castedo.

La denuncia sobre el faltante de la droga fue realizada por dos agentes de la misma fuerza de seguridad, que estaban a cargo de la custodia de la droga incautada. Según las investigaciones, los cinco detenidos sabían del faltante pero no lo denunciaron. En cambio, parecían esperar que pasara desapercibido hasta que se llevara a cabo la quema del narcótico como parte del proceso de destrucción, lo cual ya había sido ordenado por el juez.

Hasta el momento, las autoridades desconocen el destino de los ladrillos de cocaína que desaparecieron y quién o quiénes podrían haberlos sustraído. La droga en cuestión llevaba un sello con la imagen de un delfín, que es una de las marcas utilizadas comúnmente y que se asocia con la calidad de la droga. Esta marca se atribuye a envíos de Reinaldo Delfín Castedo, un conocido narcotraficante que, a pesar de estar en prisión, sigue involucrado en el negocio del tráfico de drogas.

La investigación sobre este caso está en manos del juez federal de Campana, Adrián González Charvay, quien ordenó la detención de los cinco gendarmes por delitos que incluyen "sustracción de pruebas", "incumplimiento de los deberes de funcionario público" y "omisión de denuncia" y, continúa para determinar más detalles sobre cómo ocurrió la desaparición de la droga y si hay otras personas involucradas en este caso.

Cómo se dieron cuenta del faltante

El procedimiento se realizó en el interior de las dependencias que conforman el Escuadrón 63 "Zárate-Brazo Largo" de la Gendarmería Nacional, ubicadas sobre la avenida Costanera Sur y a metros del Peaje de Zárate, luego de dos denuncias anónimas realizadas por personal de la fuerza.

Estas denuncias aseguraban que la intención de varios funcionarios era ocultar la droga, hasta que se produjera la destrucción de los narcóticos, pero agentes de la Superintendencia de Drogas Peligrosas de la Policía Federal (PFA), comprobaron que en el depósito que tenía que contener 26 kilos de cocaína, poseía solamente 10.

"Todavía estamos trabajando para determinar quién de los detenidos pudo haber sustraído el material para introducirlo en la cadena de tráfico", manifestó en Télam una fuente judicial con acceso al expediente.

Otro vocero afirmó que las imputaciones que recibirán los gendarmes estarán asociadas con su responsabilidad en la "no preservación intencional de la prueba que se les pidió que conservaran" y con la "no realización las denuncias correspondientes al verificar el faltante de los estupefacientes".

Quién es Delfín Castedo

Delfín Castedo y su hermano Raúl no solo son juzgados por dos tribunales orales federales -uno en Salta y otro en la provincia de Buenos Aires- por los presuntos delitos de tráfico de estupefacientes y lavado de activos producto del narcotráfico.

La justicia penal salteña también los investiga por ser los presuntos autores intelectuales del cruel asesinato de Liliana Ledesma, una vendedora de huevos en Salvador Mazza quién el 18 de septiembre de 2006 aseguró que Reinaldo Delfín y Raúl Castedo, junto al entonces diputado -ahora fallecido- José Ernesto Aparicio, habían "cerrado un camino vecinal que unía Salvador Mazza con Bolivia para utilizarlo para traficar drogas".

  Así mismo, Delfín Castedo ya fue condenado a 16 años de prisión como jefe de una asociación ilícita dedicada al narcotráfico y al lavado de activos y aún resta conocer su sentencia en el juicio por el asesinato a Liliana Ledesma, que se vive postergando.