Millonario robo en concesionaria salteña: hicieron "boquete" y se llevaron $120 millones

San Ramón de la Nueva Orán fue escenario de uno de los robos millonarios más resonantes de los últimos años en Salta. El pasado 25 de mayo, una banda de al menos tres delincuentes encapuchados robó 120 millones de pesos en efectivo de una concesionaria ubicada en el macrocentro de la ciudad, en barrio San Martín.

El golpe se ejecutó en pleno feriado, entre las 6 y las 17 horas, un lapso en el que el local permanecía sin custodia, ya que el sereno había terminado su turno y el comercio aún no había abierto sus puertas. La concesionaria no contaba con sistema de alarma, solo con cámaras de seguridad que ya están siendo analizadas por la Brigada de Investigaciones.

Según las fuentes policiales, los chorros actuaron con notable precisión. Ingresaron sin forzar accesos visibles, hicieron un boquete en una de las oficinas y fueron directamente hacia donde se encontraba el dinero. La secuencia sugiere un conocimiento previo detallado del lugar, lo que abrió una fuerte línea investigativa en torno a la posible participación de un entregador.

"El hecho ocurrió justo después de que el sereno se retirara, lo que refuerza la hipótesis de que sabían exactamente cuándo y cómo actuar", señalaron fuentes cercanas a la investigación.

El hecho fue descubierto recién al día siguiente, cuando el propietario del comercio automotor se presentó en el local y detectó la rotura en una de las oficinas. El llamado al 911 activó un amplio operativo policial en todo el norte salteño, aunque hasta el momento no hay detenidos ni pistas firmes sobre el paradero del dinero.

La causa quedó caratulada como "robo agravado" y está a cargo de la Fiscalía Penal de Orán. Los investigadores sostienen que se trató de una banda profesional, posiblemente con antecedentes, que conocía con exactitud los movimientos internos del negocio.

El episodio generó preocupación entre comerciantes de la zona, quienes advierten sobre la vulnerabilidad de muchos locales sin sistemas de seguridad modernos. Desde la Policía solicitaron colaboración ciudadana para aportar datos que ayuden a esclarecer el caso. Mientras tanto, los $120 millones siguen sin aparecer y los responsables, prófugos.