Murió un subcomisario de la policía que había sido herido en un operativo

Un subcomisario de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires falleció como consecuencia de las graves lesiones que había sufrido en un operativo en Villa Lugano, hace cinco meses. Se trata de Enrique Mattiauda, de 49 años, quien estaba al frente de la Comisaría Vecinal 8A y había sido herido de un disparo en el cuello durante un procedimiento por violencia de género en Ciudad Oculta, en la madrugada del 21 de noviembre de 2024.

Desde entonces, permanecía internado en el Hospital Italiano, donde fue sometido a varias intervenciones debido a las secuelas del ataque. Personas cercanas al entorno familiar informaron a TN que el fallecimiento se produjo tras una operación de reconstrucción craneal.

"Él ya había sufrido un accidente cerebrovascular y, a partir de eso, tuvieron que hacerle una cirugía en la cabeza. Durante la intervención sufrió un nuevo ACV que afectó el hemisferio cerebral que tenía sano. No resistió", explicó Silvina, allegada a la familia.

El proyectil le había dañado de forma severa la arteria carótida. Tras recibir los primeros auxilios en el Hospital Santojanni, fue derivado al Italiano, y luego trasladado a un centro de rehabilitación neurológica en Villa Urquiza.

Aunque estaba previsto que se sometiera a una nueva cirugía, su estado de salud no le permitió resistir el procedimiento. Murió el sábado pasado.

El hecho que desencadenó el ataque se inició con un llamado al 911 por un caso de violencia de género en el cruce de las avenidas Lisandro De la Torre y Eva Perón. La denuncia indicaba que una mujer había sido agredida con un arma de fuego. Ella también fue llevada al Santojanni con una herida en la pierna y logró recuperarse.

Cuando los oficiales de la seccional 8A estaban por retirarse del lugar, comenzaron a escucharse disparos. Fue entonces cuando Mattiauda fue alcanzado por una bala. Toda la escena quedó registrada por la cámara de uno de los policías que participaban del operativo.

"¡Le dispararon en el cuello!", alertó uno de los efectivos. "¡Ambulancia del SAME, por favor!", gritó otro.

El subcomisario fue llevado al hospital en un patrullero. Desde entonces, atravesó un proceso médico complejo, pero las heridas eran demasiado severas. Su lucha terminó cinco meses después del ataque.