¿Indemnización o trauma? Edgardo y Érika recibirán el auto que los chocó como compensación

Este miércoles se conoció la sentencia contra Sebastián Albornoz, el conductor que atropelló a Edgardo Oviedo y Erika Salcedo mientras conducía alcoholizado por avenida Paraguay en noviembre de 2023. Aunque fue condenado a diez años de prisión, el aspecto que más indignación generó fue la insólita forma de compensación económica dispuesta por la Justicia: las víctimas recibirán como único bien el auto que los embistió.

"Si no era el auto, no era nada. Albornoz no tenía otro patrimonio a su nombre", explicó Érika, visiblemente molesta con la resolución judicial.

El accidente ocurrió la noche del 5 de noviembre de 2023. La pareja se encontraba cruzando la avenida empujando su carro sandwichero, cuando Albornoz los arrolló a alta velocidad, con las luces apagadas, alcoholizado y pasando un semáforo en rojo. Tras el impacto, intentó huir sin asistir a las víctimas.

Las consecuencias fueron devastadoras: Oviedo perdió ambas piernas y Salcedo sufrió heridas físicas y psicológicas de gran magnitud. "Me arrastró cien metros. Estaba consciente y veía cómo salían chispas de mi mandíbula, dedos y frente", recordó Erika.

Erika y Edgardo hoy ya no están en pareja. Sin embargo, ella continúa a su lado en la recuperación. "No es que lo dejé porque perdió las piernas. También quedé mal, tanto física como psicológicamente", afirmó.

Ambos coinciden en que la Justicia no estuvo a la altura del daño causado. Consideran que la condena fue insuficiente y que el vehículo entregado no representa una verdadera reparación.

"¿Cómo se puede llamar justicia cuando la única compensación que recibís es el mismo auto que te destruyó la vida?", se preguntó indignada una vecina en redes sociales.

Este fallo reabre el debate sobre las responsabilidades civiles de los conductores y los alcances reales de la reparación judicial en casos de violencia vial. En este caso, sin otro patrimonio embargable, la restitución quedó reducida a un objeto que representa para las víctimas el símbolo del trauma.