Incendio, disparos y un terrible ataque: muchas personas tienen miedo

Rosario enfrenta una de las semanas más turbulentas de su historia reciente, sumida en el terror provocado por la creciente actividad del sicariato en sus calles.

El jueves por la noche, una serie de incidentes violentos estremecieron la ciudad. En primer lugar, dos individuos en moto prendieron fuego a un taxi estacionado en la zona oeste, exacerbando la tensión en un contexto marcado por el reciente asesinato de dos taxistas.

Posteriormente, se reportaron disparos contra la fachada de la Comisaría 15ª en un ataque que dejó a dos personas heridas por el shock. El incendio intencional del taxi ocurrió alrededor de las 22 en Pasco al 5400, cuando dos personas en moto rociaron el vehículo con nafta y luego lo incendiaron. 

Este acto de violencia se suma a una serie de ataques contra trabajadores del volante que han generado un clima de temor entre los taxistas de la ciudad.

José Castillo, el conductor del taxi incendiado, expresó su angustia en una entrevista radial: "No le deseo a nadie que le quiten su herramienta de trabajo. Yo de un momento al otro no la tengo más. ¿Cómo sigo? Estoy preocupado, mis hijos no quieren salir de la casa".

El ataque a la Comisaría 15ª revive el recuerdo de un incidente similar ocurrido el año pasado, cuando una camioneta policial fue incendiada en la misma ubicación. La escalada de violencia también incluye ataques intimidatorios a cárceles, escuelas, iglesias y centros de salud.

La fiscal regional María Eugenia Iribarren anunció la creación de un equipo de fiscales para investigar los casos ocurridos desde el martes pasado, compuesto por Patricio Saldutti, Luis Schiappa Pietra, Marisol Fabbro, Franco Carbone y Fernando Dalmau.