Fue borracho a la casa de su ex y ella tuvo que pedir ayuda por una ventana

Un hombre de 33 años fue condenado a tres años de prisión efectiva luego de violar una orden de restricción y entrar sin permiso a la casa de su expareja en Cerrillos. El acusado, identificado como Exequiel Raúl Palacios, fue detenido tras un episodio de violencia ocurrido en diciembre del año pasado, cuando se presentó ebrio en el domicilio de la víctima.

El fiscal penal interino Daniel Espilocín representó al Ministerio Público Fiscal durante la audiencia, que fue dirigida por el juez de Garantías Guillermo Pereyra. Allí se resolvió condenar al acusado por los delitos de desobediencia judicial y violación de domicilio, en el marco del Plan Piloto de Oralidad.

Según se informó, el hecho ocurrió el 15 de diciembre de 2024. La mujer se encontraba en su dormitorio cuando comenzó a oír gritos desde el exterior. Era Palacios, quien le dirigía insultos en voz alta desde la calle. "Le solicitó que se retirara, pero el acusado hizo caso omiso", indica el expediente. No conforme con eso, ingresó por la puerta principal -que no tenía cerradura de seguridad- y comenzó a golpear la vivienda con los puños.

"Le pidió insistentemente que lo dejara entrar", relataron fuentes judiciales, y frente a la negativa de la mujer, su actitud se tornó aún más agresiva.

Desesperada, la víctima pidió ayuda a través de una ventana que da a la calle. Una joven que pasaba por el lugar escuchó el pedido y llamó al 911. Un patrullero llegó pocos minutos después y los efectivos intervinieron para detener al agresor.

Por estos hechos, se le impuso una pena de seis meses de prisión. Dicha condena fue unificada con una sentencia anterior de dos años y seis meses por robo, resultando en una pena única de tres años de prisión efectiva.