El triste adiós al colectivero que mataron de un disparo: "Estuvo en..."

En medio de un profundo luto, familiares, amigos y colegas de César Roldán, el chofer de la línea 116 asesinado brutalmente el pasado sábado en Rosario, se congregaron en el velatorio en una emotiva despedida que concluirá al mediodía.

La familia del conductor de 40 años reiteró que la víctima "estuvo en un momento donde no tenía que estar", descartando de manera categórica cualquier conflicto personal que pudiera haber desencadenado el trágico suceso. David, tío de César Roldán, compartió en diversos reportajes que su sobrino "no andaba en nada raro" y que el ataque fatal ocurrió cuando tenía franco en su jornada laboral.

"No se merecía esto", expresó con profundo pesar el tío, mientras destacaba que la esposa del colectivero quedó "destrozada" por la pérdida. A pesar de la conmoción, los hijos de 9 y 11 años de César Roldán pidieron ser llevados al velatorio para despedirse de su padre, demostrando el impacto emocional que ha dejado el trágico evento en la familia.

Según relataron los familiares, el chofer asesinado cambió su turno del sábado con un compañero de la empresa estatal Movi porque tenía planeado llevar a su hijo a jugar un partido de fútbol este lunes. La víctima, quien no estaba involucrada en actividades sospechosas, fue atacada a balazos el pasado sábado a las 16 en la zona oeste rosarina.

En tanto, la Unión Tranviarios Automotor (UTA) mantenía un paro de colectivos durante la mañana del lunes como muestra de solidaridad y reclamo de justicia por el crimen de César Roldán.