El primer cumpleaños sin Kim: dolor, homenajes y un dibujo como último recuerdo
A dos meses del crimen que conmovió a La Plata, la familia de Kim Gómez enfrenta su primer cumpleaños sin ella.
A casi dos meses del crimen que conmovió a La Plata, la familia de Kim Gómez enfrenta uno de los momentos más duros: el primer cumpleaños sin ella. La nena, que este lunes hubiera cumplido 8 años, dejó como último regalo un dibujo que hoy sus padres atesoran como un tesoro invaluable.
"Le encantaba dibujar. Mi última charla con ella fue por un dibujo", recordó Marcos, su papá, con la voz quebrada. En aquella tarde, Kim había hecho un retrato de un capibara y un pollito. Estaba enojada porque, según decía, no le había salido lindo. Sentados en el sillón de casa, terminaron el dibujo juntos y se lo regaló a su mamá, Florencia.
Hoy, ese dibujo es el refugio emocional de Florencia, quien carga con la peor pesadilla: haber visto cómo dos delincuentes de 14 y 17 años le robaron el auto y se llevaron a su hija adentro. Durante diez cuadras, arrastraron a Kim contra el asfalto. Los múltiples golpes provocaron su muerte.
El ataque ocurrió el 25 de febrero en el cruce de la avenida 72 y calle 25, en Altos de San Lorenzo. Para recordar a Kim en su cumpleaños, su familia y amigos organizaron homenajes. Este sábado, la artista plástica Jésica Muñoz pintará un mural en su honor. "Kim pidió un cumpleaños con la temática capibara y se lo vamos a dar", contó su papá. "No hay nada que festejar sin ella, pero queremos recordarla y pasar un lindo momento".
La pasión de Kim por el dibujo también inspiró otros gestos. A través del lema #UnDibujitoParaKim, las redes sociales se llenaron de dibujos dedicados a su memoria, en una muestra conmovedora de amor colectivo.
Marcos enfrenta el dolor de forma cruda y sincera. "Soy consciente de estar experimentando el peor dolor que existe. Te duele la cabeza, el cuerpo, el alma. Todo", relató. Aunque las noches siguen siendo difíciles, cada amanecer le renueva un poco el aire para seguir adelante, impulsado por Ciro, su otro hijo de 10 años.
"Los chicos tienen algo increíble. Olfatean que uno está mal y hacen lo posible para verte sonreír", dice Marcos. Ciro también siente la ausencia de su hermana, pero muestra una madurez inesperada. "Antes éramos dos, ahora es Ciro solo. Eso me parte al medio", confesó.
El club Real Infantil, donde Ciro juega al fútbol y donde Kim solía alentarlo desde la tribuna, será la sede del homenaje del domingo. "La idea es pasar un rato lindo en familia, compartir un mate, una charla. Estaría genial", resumió Marcos, aferrándose a esos pequeños momentos de amor y recuerdo para honrar a su hija.
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