Rosa Torino: testigos de la defensa cuestionaron a las víctimas y ¿mintieron?

Este martes se reanudará el histórico juicio al sacerdote Rubén Agustín Rosa Torino, acusado de abusar sexualmente de tres víctimas, dentro de la congregación que encabezaba. Se trata de la penúltima jornada de testimonios en los que se busca la verdad de los aberrantes episodios denunciados. 

El sacerdote está acusado de los delitos de abuso sexual gravemente ultrajante por la duración, agravado por ser ministro de culto reconocido, en perjuicio de dos víctimas; y de abuso sexual simple agravado por ser el autor ministro de culto reconocido, en perjuicio de una tercera.

La octava jornada de la audiencia de debate se desarrollará desde las 8, en Salón de Grandes Juicios del Poder Judicial de Salta y está prevista la declaración de más integrantes de la congregación, entre ellos un sacerdote subalterno del acusado.

El Tribunal colegiado es presidido por el juez Maximiliano Troyano e integrado por la jueza Norma Vera y el juez Roberto Faustino Lezcano. Las audiencias se extenderán hasta el jueves 8 julio, día en el que están previstos los alegatos y la sentencia.

Una psicóloga que colaboraba con Rosa Torino, testigo propuesta por la defensa, intentó tirar abajo el relato de dos de las víctimas. 

Notó fabulación en la ex monja víctima y reconoció haber tenido contacto con ella fuera de la terapia, lo que aseguró que está permitido por el código de ética profesional, por el humanismo existencial. También reveló que la derivo a un médico clínico por problemas de gastroenteritis.

Ya en un exceso por favorecer al sacerdote juzgado, señaló que en una ocasión compartió una merienda con uno de los ex novicios víctimas de abuso sexual en Finca de la Cruz, ya que le dijeron que quería suicidarse. Sobre esa charla, explicó que Rosa Torino no lo trató porque no dio su consentimiento y destacó que "el joven tenía risas inapropiadas" y aparentes problemas de motricidad fina.