Agustín Pérez Marchetta

Sociólogo
Si me permiten hablar

Todo lo que usted hombre quiso saber sobre el aborto y nunca se atrevió a preguntar

Este artículo, desde una perspectiva sociológica y de derechos humanos, buscará aportar argumentos para la despenalización del aborto.

Antes que nada, saber que el tema se instalo mediáticamente este 2018 cuando Jorge Ríal cedió su programa para hablar del aborto, algo paradójico señalado por Soledad Vallejos: para que sea aceptado y debatido socialmente el tema del aborto lo tiene que terminar instalando un varón blanco famoso avalados por el paradigma heteronormativista (lo normal es que te gusten personas del sexo opuesto, donde predomina la mirada del hombre). Es increíble que solos se pueda dar así y no de otra forma

De éticas y morales

Hay una ética muy fuerte y poderosa en la república argentina que impide que se hable del tema sin tapujos: la ética católica. La Argentina, a principios de siglo XX se funda y homogeneiza principalmente sobre 3 instituciones: la escuela, el ejército y la Iglesia.

La ética católica, se ve impregnada en los rosarios e imágenes católicas en la mayoría de los recintos de las instituciones públicas "laicas" de la Argentina, es casi como una cortina de hierro que impide ver la muerte, miedo y desolación que sufren más de 500.000 mujeres que se practican abortos clandestinos por año en nuestro país. En la clandestinidad, no hay derechos garantizados, por lo general mueren las mujeres de sectores más precarizados, vulnerables y desprotegidos, porque un país donde hay desigualdad e individualidad el dinero puede comprar mayor seguridad. Por ello se pide la despenalización del aborto, porque sucedió y de hecho esta sucediendo en este momento.

Esta ética corre como un río subterráneo por las instituciones publicas (ejército, escuela, hospital), y se encuentra presente y al frente en los barrios con las iglesias y en las palabras, con las homilías. Nubla la posibilidad de contemplación de la otra campana. La campana de las mujeres, porque en el catolicismo, una de las mayores realizaciones de la mujer es ser madre, como la virgen maría.

La misma encarna a través de diferentes morales que circulan entre nosotros, sostenidas principalmente por varones. Algunas de esas voces pueden ser el referentes populares como Grabois (https://www.elpaisdigital.com.ar/contenido/grabois-no-estoy-a-favor-de-la-legalizacin-del-aborto/15167), conservadores rancios como el diputado Nacional Alfredo Olmedo (http://www.quepasasalta.com.ar/nota/noticia-193079/), o Neoliberales reciclados como el jefe de Gabinete Marcos Peña Braum (https://www.lanacion.com.ar/2112040-marcos-pena-sobre-el-aborto-no-estoy-a-favor-de-la-despenalizacion-pero-entiendo-la-complejidad-del-tema) o el mismisimo presidente Mauricio Macri.



El tema suena por todos lados, movilizado un poco por el paro internacional del 8 de marzo, pero también por el gobierno nacional, quien ante el descontento por los tarifazos, aumento de la inflación y paritarias a la baja, busca poder correr el eje de discusión.

Con la cancha inclinada, con la mayoría en contra, esta coyuntura no deja de ser una oportunidad histórica para garantizar y aprobar el derecho a miles de mujeres que ponen en riesgo su vida año a año.

Los argumentos de la Vida

Es interesante analizar los argumentos que circulan en contra del aborto: por todos lados resuena la palabra Vida. Esta palabra es polisémica, es decir, que tiene multiplicidad de sentidos: vida puede ser una célula de nuestro cuerpo, el óvulo, el espermatozoide, la cigota, el embrión, el feto, etc. El tema es que se apelan a argumentos biológicos, cuando en realidad SE DETERMINA SOCIALMENTE QUE ES VIDA. Al tener la ética católica midiendo cada paso y acción de los ciudadanos argentinos, siempre la balanza parece estar mas inclinada para los derechos de la "vida" gestándose en el cuerpo de la mujer que la vida de la mujer misma.

En los países donde esta legalizado el aborto el límite va desde las 12 hasta las 24 semanas, determinado cuando el feto se puede auto valer por si mismo, es decir, cuando es capaz de vivir sin estar dentro del cuerpo de la mujer. A su vez pesa el criterio médico, buscando preservar la vida de la mujer.

A su vez causa impresión el contraste de muchas personas que se asumen como PRO VIDA cuando esa vida ya nació, se desarrollo en contextos sociales, económicos desfavorables y sale a robar para sobrevivir en los márgenes de un sistema. Quizá es más fácil empatizar con un embrión en un útero donde, como diría Hegel, todo esta "en potencia" todo puede ser y no cuando ya es un ser humano "desvíado" que atenta contra la vida y propiedad privada de los incluidos.

Sacando al aborto del útero: vos, ¿abortas en tu vida?

El otro día, en una reunión con amigos pregunte, si un hombre que había tenido un hijo y no se hacía responsable desde ningún plano del mismo (negando su vida) no era un aborto también. La mayoría asintió. Cabe recordar que el lenguaje que utilizamos por lo general los conceptos son los preestablecidos por los sectores dominantes. Y como imperan ciertas reglas católicas en nuestra sociedad, la interrupción voluntaria del embarazo queda bajo el título "aborto". Entonces, es un ejercicio necesario para despertar nuestra sensibilidad y horizontes nuevos poder trasladar la palabra a otros ámbitos: aborta el que no reconoce a su hijo, aborta el que no pasa la cuota alimentaria, aborta el que luego no se preocupa por la inserción social real de miles de niños, niñas y adolescentes de nuestra sociedad.

Actualmente la ley que se impulsa consta de 3 grandes dimensiones: educación sexual para decidir, anticonceptivos para no quedar embarazadas y aborto para no morir. Es necesario dar el debate y entender que más que una discusión teológica y moral es un tema de salud pública

Comentarios

  • Diego

    Antes que nada, el término "neoliberal" no existe; Es un invento de los zurdos. O sos liberal o no; Es lo mismo que te diga a vos (el que escribió la nota) neozurdo.
    Yendo al meollo de la cuestión, legalizar el aborto es atentar contra la familia y la vida. Es la agenda que propone el puto marxismo cultural, los progresistas y las desagradables feministas

    Ver más

    Responder
  • Guitarra

    uuuhh culeao! sos blandito bo, hace corta la bocha! dominao!

    Ver más

    Responder
  • hombre

    en una menor de edad quien decide el aborto

    Ver más

    Responder
  • Juan

    Por una vez estoy de acuerdo con Marcheta.

    Ver más

    Responder

Tucomentario

Nombre

Más de Política