Estaba a cargo de una sala COVID en Salta y hará una huelga de hambre por el hisopado

El norte provincial vive momentos de enorme angustia. La terrible situación alcanzó ya a los profesionales de la salud, y la historia de Matías Guaymás nos interpela a todos. "El 13 de junio llegue a hacerme cargo de la sala COVID en Tartagal aun teniendo diabetes y estando en grupo de riesgo, pero toda mi vida me forme para esto, es mi formación y vocación", inicia la entrevista realizada por el periodista Luis Mena para Videotar.

"Me aislaron el viernes y hasta hoy no me han dado respuesta", señala angustiado el profesional y advierte que a partir de este momento iniciará una huelga de hambre para que las autoridades provinciales le den una respuesta y le realicen el hisopado y testeo correspondiente.

"Esta protesta me puede tocar el trabajo, se que me puede costar el puesto, pero está de por medio mi vida", disparó.

Fiel a su sentido humanitario desembarcó en Tartagal para formar fila en la primera línea de batalla. "Llegue el 13 de junio a Tartagal, a partir del día uno trabaje con todos y para todos", relató y continuó "me formé toda mi vida para esto, me produce mucho dolor que nadie de respuestas".

A su vez, el profesional habló de la situación sanitaria e hizo hincapié en las dificultades que tienen en las guardias y advirtió "fallas en la organización". "Podría haber pedido la licencia extraordinaria pero no quise", resaltó, hoy después de tamaña entrega se siente abandonado a su suerte por parte de las autoridades sanitarias locales.

"Es una situación límite, nunca pensé que me dejarían solo", dijo con la voz totalmente quebrada, asegurando que extraña a su familia, y que si bien los síntomas han cesado, ningún profesional o autoridad del Ministerio de Salud se acercó a ver su situación.

Aislado en un hotel de la localidad norteña, sostiene el inicio de una huelga de hambre que desde ya nos sacude a todos. Aquellos que se llevaron los aplausos en las primeras horas de la cuarentena hoy no encuentran contención alguna y además de temer por su vida, podría terminar perdiendo su puesto de trabajo.

"Trabajé 4 años en la parte pública y entre después de rendir por concurso, esto siempre fue mi vida. Sé que la medida de fuerza me puede costar mi trabajo, pero está mi vida de por medio", indicó.

Cabe recordar que semanas atrás, en el Hospital Juan Domingo Perón, un chofer de ambulancia dio positivo de coronavirus a través de un hisopado que se ganó por sorteo.