Tercer domingo de junio

Día del Padre en América Latina ¿cómo se celebra?

Ante la cuarentena más estricta en algunas ciudades se planteó la posibilidad de mover la fecha.

Juan Manuel Lucero

Lic. en Comunicación Social

El día del padre se celebra en toda América el tercer domingo de junio. Desde los Estados Unidos a Argentina se adoptó esta fecha gracias al homenaje que en 1909 hizo Sonora Smart a su padre para reconocer el esfuerzo, tras quedar viudo, de criar a sus seis hijos. Este año, la celebración será atípica.

Desde 1956 a 1960, en Argentina se celebraba el Día del Padre el 24 de agosto, como modo de homenajear a José de San Martín en el día del nacimiento de su primera hija. En 1960, se acopló al resto de América, de manera que ahora la celebración coincide con México, Colombia, El Salvador y los Estados Unidos, entre otros.

Este año en particular, con las condiciones de confinamiento en Ciudad Autónoma de Buenos Aires y en el Área Metropolitana, casi la mitad de la población estaría imposibilitada de concurrir normalmente a los comercios o realizar reuniones familiares. En cambio, en las provincias, la cuarentena más relajada ha permitido que reabran los comercios.

En Chile sucede algo similar, Santiago es la zona donde la cuarentena se está aplicando con mayor fuerza. Mientras el resto del país no ha tenido que realizar la cuarentena, pero se mantiene la "guardia alta".

En Colombia, en tanto, los comercios no funcionan con normalidad, la circulación está limitada a la terminación de las cédulas de identidad y cada departamento ha ido flexibilizando algunas actividades. Mientras Bogotá mantiene medidas más rígidas hasta el 15 (por ahora), Medellín y Tunja ya volvieron a abrir centros comerciales.

En México, finalmente, la política de medir con semáforo para la nueva normalidad, ha llevado a las distintas ciudades a diferentes escenarios. La reapertura gradual ya comenzó en la Ciudad de México y en algunas de las ciudades más importantes del país. 

Este Día del Padre será una jornada fuera de lo común, los comercios sentirán la disminución de ventas en las distintas latitudes del continente. Sin embargo, tal vez sea ocasión para poner en valor las cuestiones no materiales y valorar la presencia y salud de nuestros seres queridos. 

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