Envuelto en un escándalo de trata, ahora quiere volver a ser intendente

Salta, una provincia fronteriza afectada por cifras que verdaderamente duelen y casos que han sacudido el orden político. En el año 2013, la Policía Federal, AFIP, y la Policía de Seguridad Aeroportuaria realizaron una serie de allanamientos en locales de toda la provincia, el saldo fue realmente sorprendente.

Estos locales ya habían sido cuestionados en varias oportunidades. Un extraño manto de protección mantenía en funcionamiento estos comercios de prostitución en toda la provincia. De los allanamientos promovidos por fuerzas de seguridad nacional se rescataron a 34 mujeres, víctimas de la trata de personas. Según los informes expuestos, habían sido retenidas por los encargados de los negocios, que le habrían quitado los documentos.

Aparte de este importante rescate, en los locales allanados encontraron a personas vinculadas con la política local, entre esos a Carlos Villalba, quien por aquel entonces era intendente de Salvador Mazza. Al jefe comunal del fronterizo municipio se lo señalaba por diferentes delitos, según el propio Villalba, todo se debía a un "tema político" por lo que "agrandaban completamente todo".

En una entrevista que brindó al periodista Eduardo Feinman, el jefe comunal aseguraba que este entramado político, armado en su contra, lo estaba asociando con "el narcotráfico y trata de personas". Aun con todo esto, más bochornoso resultaba escucharlo decir "no estaba adentro del prostíbulo, estaba cerca del lugar, en un bar, en una casa tomando una cerveza con la gente", las contradicciones estaban en la cara de todos.

El juez Federal 2, Miguel Medina fue quien manejo el avance de la causa. Por otra parte, señalaban al ya destituido intendente por ser el encargado de trasladar a 3 mujeres desde Jujuy a Salta Capital, obviamente Villalba manifestaba desconocer cuál era el destino que les esperaba a estas 3 mujeres.

La detención de Carlos Villalba fue tan fugaz como la de los otros involucrados en estos hechos. El costo más grande fue perder la intendencia de Salvador Mazza. En tanto, la llegada de Mercedes Junco como interventora de esa localidad, suponía cambios que nunca se dieron. Para la interventora, según lo publicado por diario El Tribuno, "depende de la persona que está al mando", y fue por esto que mantuvo al mismo gabinete que trabajaba codo a codo con Villalba.

Curiosamente, muchos habitantes de Salvador Mazza, señalaron a Mercedes Junco de haber acompañado a Carlos Villalba durante "viejas campañas". Además, como lo publicó El Tribuno, "en esos procesos electorales, el ex intendente Villalba, instalaba en Bolivia, mesas con padrones y votos que entregaba a ciudadanos bolivianos con DNI argentino, a cambio, recibían dinero o bolsones".

Durante el 2015, Carlos Villalba hablaba livianamente de su absolución y de que buscaría pelear la intendencia de Salvador Mazza nuevamente. Contrario a esto, el fiscal subrogante de la Cámara Federal de Salta, Eduardo Villalba, a cargo de la investigación, aseguró que el ex intendente está imputado por trata de personas y que su situación no ha sido aún resuelta. Otro caso más quedaría debajo de la alfombra.

Con esta idea, y un extraño manto de impunidad reinante, el destituido intendente Villalba decidió no presentarse a los llamados de la justicia para comparecer sobre esta causa. Tras la quinta falta a prestar declaración el fiscal pidió la detención por la vinculación en la causa de trata de personas, sin mucho exito.

Villalba siempre manifestó estar en compañía de una amiga, conocida como Marisel, quien al momento de prestar declaración sembró más duda. La mujer, dueña de la casa-prostíbulo, dijo "trabajo de prostituta hace 6 años, tengo clientes políticos, pero tienen mucha discreción, cuando los veo me sorprendo, pero hago como si nada", con estas declaraciones las sospechas de la existencia de más "personajes de la política" vinculados a este terrible delito crecía.

Marisel explicó a medios locales que "la vida de prostituta es limitada de tiempo y hay que aprovechar todo lo que se pueda", intentando justificar el delito comprobado. Lejos de aclarar la enorme cantidad de dudas, los dichos dejaban un sabor amargo a impunidad, "hago lo que tengo que hacer, no me interesa más de sus vidas, hay que cuidar el trabajo", finalizó la mujer.

Todos los detenidos en este histórico allanamiento, en el que se rescataron a 34 mujeres, fueron liberados. En la actualidad el ex intendente Villalba se lanza a una nueva posible candidatura para este 2019 que ya cuenta hasta con el apoyo de otros actores políticos del jet set salteño. Este caso quedaría, debajo de la alfombra.