Hackearon y robaron más de 100.000 fotos del Renaper: las consecuencias

En un preocupante suceso, se reveló que un archivo del Registro Nacional de las Personas (RENAPER) fue robado, conteniendo la impactante cifra de 116.456 fotografías de ciudadanos argentinos. Este archivo fue posteriormente publicado en un foro de compra-venta de datos en la plataforma de mensajería Telegram.

El descubrimiento de este robo fue realizado por el propio RENAPER, que rápidamente identificó la filtración de estos datos sensibles. Este incidente revive un episodio similar ocurrido en 2021, cuando más de 60.000 datos fueron filtrados en circunstancias similares.

Una de las mayores preocupaciones derivadas de esta filtración es el riesgo potencial de suplantación de identidad. Las fotografías robadas pueden ser utilizadas para obtener acceso fraudulento a servicios y cuentas restringidas pertenecientes a las víctimas.

Esta serie de eventos llevó a una reevaluación de los protocolos de seguridad en las instituciones estatales, con el objetivo de fortalecer las medidas de protección de datos y prevenir futuros incidentes de esta naturaleza.

De quienes son las fotos robadas en el RENAPER

Se ha informado que el archivo comprometido tiene un tamaño de 2.2GB y, lamentablemente, continúa disponible en un foro de Telegram.  Las fotografías filtradas son de alta calidad y corresponden a ciudadanos cuyas imágenes fueron capturadas al obtener o renovar su DNI o pasaporte. Estas fotos están asociadas con el número de documento o pasaporte respectivo, lo que facilita la correlación de la imagen con el nombre y otros datos personales. 

 En cuanto a la composición de los archivos filtrados del Renaper, las imágenes están comprimidas en un archivo .rar de 2.2 GB. 

Según Juan Brodersen, periodista especializado en ciberseguridad del diario Clarín, estos archivos abarcan desde los DNI con números iniciales 10 hasta los 57 millones, lo que incluye imágenes de menores. 

Entre los riesgos asociados a la filtración de estas imágenes se encuentra la posibilidad de suplantación de identidad, que puede ser utilizada para obtener accesos no autorizados, robar información confidencial y diseñar esquemas de ingeniería social y estafas en línea.