De intervenciones y otras yerbas...

La semana viene movidita. De repente nos dimos cuenta que al monstruo dormido del PJ le mojaron la oreja. Cuántas veces le pedimos a la dirigencia política que no ajusten la cincha porque se les iba a desbocar el caballo del comisario.

A las pruebas me remito. En las últimas elecciones, donde quedó un tendal de moribundos, que por ayudín de quién sabe que ángel milagrero cibernético lograron alcanzar la raya, para no quedar en la estoqueada sangrando desollaos, como decía mi padre: "Yo hago el bien siempre donde ando, para que mis hijos cosechen".  Tal parece que la premisa tan gauchesca no son mandamientos para los que siembran tempestades, ya que olvidaron hace rato, las razones por la que nació el Partido Justicialista, las bases fundacionales, Justicia Social, Soberanía Política e Independencia Económica.

El cimbronazo fue tan fuerte que los encontró a todos destilando historias nostalgiosas en los cafés, y trastabillando con la chata al pie del catre. ¿Y ahora? ¿Cómo sigue el juego del don pirulero? El intendente Sáenz marcó una impronta y hasta ahora y tal parece que la imitación plágica es de norte a sur y este a oeste. Nadie mas se quedó en casa rasgando el charango hasta la próximas elecciones, el nuevo método de hacer política para los viejos, los tiene con el caballo cansao. O lo que es peor ¿sin comisario? 

Ahora las campañas son mediáticas, en las redes sociales, año redondo, claro cuando hay que mostrar, y hasta en eso se corre el riesgo, porque cuan más alta la vara más exigente se vuelve el vulgo, que siempre espera desde su nube de ... pensamiento que los otros le solucionen la vida.

Por estos días he visto más pobreza que nunca, he visto más angurria que nunca, he visto que el cronometro está corriendo a full, no hay códigos, son los mercaderes que Jesus corrió del templo, con la billetera en mano podemos decir que algunos no quieren con Miguel, pero sin Miguel no les alcanza, el hacedor de sueños de los más ilustres desconocidos y el cirineo de cruces de plomo en mochilas de nylon, ahora echó los dados a suerte o verdad, nadie tiene la vaca atada, absolutamente nadie. Otros dejarán fortunas en manos de mercaderes compulsivos, con el temor desvelador si al final del trueque de escrúpulos, la enajenación de ideologías y dogma, el 20 19 los encontrará unidos o derrotados.

Por ahora oremos hermanos, para que al final de las horas de cada día Dios sea una luz en nuestros caminos, porque están serrucha y serrucha no?