Se compraron una birra pero a mitad del trago se toparon con algo asqueroso

Todo transcurría bien hasta que tomaron el segundo trago de la bebida y notaron que el sabor era muy distinto al habitual. "Comenzamos a leer la etiqueta porque creímos que había cambiado de sabor y nos dimos cuenta que tenía un pedazo de espiral en el interior, el sabor era horrible", contó la pareja.

Se trata de una conocida marca adquirida en un local de comida rápida que funciona de la localidad San Pedro, Misiones. El insecticida, utilizado normalmente para repeler mosquitos, estaba incrustado en el fondo del envase y por su aspecto, desde hace un buen tiempo. Si bien, los derivados del espiral no son considerados tóxicos, de acuerdo a lo consultado por El Territorio con un profesional médico, los casos por contacto con alimentos podrían derivar mínimamente en una gastroenteritis.

En este caso, como se percataron del mal gusto en los primeros tragos, la pareja no presentó malestar digestivo, en tanto, el hecho pone en evidencia las fallas en el envasado el producto, tratándose de una marca muy consumida en la zona, por lo que generó preocupación en los consumidores.

"Cuando mi marido tomó el segundo trago notamos que estaba alterado el sabor, como el envase es oscuro a simple vista no vimos, comenzamos a revisar la etiqueta y después con una linterna iluminamos hacía el fondo", dijo Anita, y añadió que "el reflejo de la luz nos permitió ver que algo había, después de observar bien vimos que era un pedazo de espiral adherido al fondo del envase".

En esa línea agregó "llamamos al dueño del local, quien se acercó personalmente a nuestro domicilio y le hicimos entrega del envase con el objeto en su interior".

La presencia del espiral en el interior de envase difícilmente podría haber sido percibido por el dueño del local de comidas, igualmente mostró la misma sorpresa y reconoció el valor de la cerveza a la pareja, publicó El Territorio.