Se ganaban la vida en el Museo de Cachi y piden a gritos volver a trabajar

Este fin de semana se producirá la reapertura de los museos en Salta y se generó una gran expectativa en el sector. Salteños y turistas recibieron con los brazos abiertos la noticia ya que podrán visitar y conocer el rico patrimonio cultural de la provincia. Sin embargo no todo es color de rosas y hay personas que la siguen pasando mal. Por ejemplo Selva Lontoya y Reina Carral, dos empleadas del Museo de Cachi que se quedaron si trabajo y todavía no fueron restituidas.

Según consignó Diario de Cachi, las dos mujeres llevaban 20 años ininterrumpidos trabajando en el Museo Arqueológico Pío Pablo Díaz cuando se quedaron sin su fuente laboral por la cuarentena dispuesta por la pandemia de coronavirus. Para colmo de males, cobraban el sueldo en base a la recaudación de la venta de entradas.

Ante la reapertura de los museos autorizada por el Comité Operativo de Emergencia (COE), las mujeres que realizan diversas funciones en la institución piden a las autoridades de Cultura de la Provincia que se hagan eco de sus respectivas situaciones para que puedan recuperar el trabajo que tanto aman.

Selva y Reina son las personas más antiguas que trabajan en el museo de Cachi, y vienen luchando todo este tiempo y acotando todo los medios para que el gobierno de la provincia les otorgue una repuesta positiva a su pedido.Volver a su fuente laboral y trabajar en condiciones dignas.

"Hicimos el pedido a las autoridades locales, intendente, diputado, senador, a través de ellos intercedan por nosotras ante el gobernador Gustavo Sáenz o el ministro de Educación y Cultura, Matías Cánepa, una entrevista, para que conozca nuestra situación y nos den una respuesta positiva. Pero no tenemos ninguna respuesta de parte de las autoridades locales", manifestó Selva a Diario de Cachi.

"Nos entristece saber que mañana abren los museos y no vamos a estar nosotras trabajando cuando dejamos nuestra vida en la institución. Trabajamos veinte años, sin feriados, sin aguinaldos, sin fines de semana, fuera del horario normal y cumpliendo varias funciones como, limpieza, recepcionista, atención al público, organizado los eventos de educación que tiene el museo y además nos capacitamos en la área de reserva del museo. Por eso le pedimos de rodillas al gobernador que nos dé un trabajo digno o que nuestro expediente salga", imploró Reina.