Buscaba desesperadamente su bici y la recuperó: "Quería compartir la felicidad"

Que no te pase nunca. Un hombre fue engañado en la calle por otro para sustraerle la bicicleta. Según el posteo en sus redes, fue víctima de una treta para sacarle la bici. Aparentemente, el ladrón le dejó en calidad de seña por su bici su DNI y unas pelotas para hacer malabares. Jugó con sus buenas intenciones y no volvió más con la bici.

Para poder dar con el paradero, y acudiendo a la solidaridad de todos para poder encontrarla ofreció una recompensa de 5 mil pesos, que luego subió a 15 mil. Hoy la historia es otra, y tiene un final feliz. Pudo recuperar su "cleta" y contó todo el trasfondo que vivió en la búsqueda en la que tuvo que convertirse en una especie de detective.

"Fueron unas semanas durísimas, andando entre detective, creyente, escéptico, masticando bronca, desasosiego, relojeando cuanta bici pasara, viendo de esquivar la venganza y las ganas de moler a palos al pobre diablo que decidió arrebatarme la bici.
Los días sucedían y me desesperaba, denuncie social y legalmente, ofrecí recompensa.
En una de las incursiones junto a Pardo, genio de la vida, un pibe curioso, curtido como pocos y con el corazón gigante, encontramos al tucumano. Sólo, duro, perdido te diría. Conteniendo la rabia fuimos a la casa del tranza, donde el pibe cegado por el consumo la había empeñado, en esos infiernillos de calles de tierra y techos de chapa de la salta olvidada. No estaba la bici, daban ganas de estrellar la impotencia en la cara del vago. Me empezaba a pesar la espera y me preguntaba: ¿Qué vale más? ¿una bici que adoras? ¿un ser que aborreces? Para loco, es humano, el esta peor que vos, me decía y con razón Nahuel. El tucu me chamullaba a lo que atine a decirle mirándolo a los ojos: no me hables más flaco, para mi tu palabra ya no vale nada.
Me llamaron ayer, hoy pagué el empeño + un plus de intereses (demora en retirar, estacionamiento, tener un aura barrial y lo que ud se imagine) y me la devolvieron.
Gracias a todos los que se sumaron y se hicieron eco.
Así como les compartí la desazón, les quería compartir la felicidad."

La publicación: