Tensión en la marcha de los jubilados: Gendarmería empezó a despejar con balas de goma

Un clima de alta tensión se vive este miércoles en las inmediaciones del Congreso de la Nación, donde efectivos de la Policía Federal detuvieron a ocho personas durante una protesta de jubilados, apoyada por barrabravas y partidos de izquierda. Dos de los detenidos portaban armas de fuego, mientras que otro llevaba un cuchillo, según confirmaron fuentes policiales.

La manifestación, que comenzó de manera pacífica, escaló rápidamente cuando los manifestantes intentaron avanzar sobre las calles aledañas al Congreso. Ante esto, las fuerzas de seguridad aplicaron el protocolo antipiquete y respondieron con balas de goma, gases lacrimógenos y camiones hidrantes para dispersar a la multitud. Sin embargo, la situación se descontroló cuando integrantes de las barrabravas rompieron veredas y comenzaron a lanzar escombros contra los efectivos.

Más de 850 agentes de la Policía Federal, Gendarmería y la Policía de la Ciudad se desplegaron en un operativo de seguridad para contener la protesta. A pesar de los refuerzos, los manifestantes lograron avanzar por las calles Solís, Hipólito Yrigoyen y Avenida Rivadavia, en dirección a la avenida 9 de Julio. Una densa cortina de humo, producto de los gases lacrimógenos, cubre la zona, mientras equipos del SAME atienden a los heridos en el lugar.

En las calles cercanas al Congreso, la situación es caótica. Los barrabravas prendieron fuego contenedores de basura, lo que generó columnas de humo y dificultó el tránsito en la zona. En Avenida de Mayo, los manifestantes lograron cortar la circulación con vallas incendiadas, aumentando el clima de confrontación.

Las primeras columnas de barrabravas llegaron esta tarde al Congreso para respaldar la marcha de los jubilados, quienes reclaman la prórroga de la moratoria previsional y la restitución del "100%" de los medicamentos del PAMI, entre otras demandas. Ante la presencia de estos grupos, las fuerzas de seguridad se desplegaron en la zona para garantizar el cumplimiento del protocolo antipiquetes y evitar que la situación se agravara aún más.