Rodrigo Solá: "Los presos usan tachos como baños y se turnan para dormir"

La crisis penitenciaria en Salta sigue sumando denuncias alarmantes, con condiciones inhumanas y de hacinamiento extremo en las comisarías de la provincia. La situación fue presentada ante la Corte de Justicia de Salta, a través de un hábeas corpus colectivo correctivo, como una medida para revisar las condiciones de detención y tratar de revertir las irregularidades que afectan a miles de detenidos en la región.

Rodrigo Solá, presidente del Comité contra la Tortura, Tratos Crueles e Inhumanos, expuso que las comisarías salteñas son los lugares más críticos en cuanto a encarcelamiento, especialmente en localidades del interior como Tartagal, Orán, Metán y Rosario de la Frontera. Según Solá, la situación es alarmante: "Las celdas, diseñadas para albergar a dos o tres personas, actualmente alojan a hasta 30 internos. Esto provoca que los detenidos tengan que turnarse para dormir en el suelo por falta de espacio".

Además, el presidente del Comité destacó la grave falta de higiene, la proliferación de enfermedades e insectos, y la inexistencia de baños en muchas de las comisarías. "En algunas dependencias policiales, los detenidos deben usar tachos o bolsas como baños, y no hay acceso a ningún tipo de infraestructura sanitaria. La falta de ventilación y de iluminación también agrava aún más las condiciones", detalló Solá a Aries.

Ante esta situación, la Corte de Justicia de Salta asumió la competencia sobre el caso y convocó a una audiencia conciliatoria que reunirá a autoridades de cinco ministerios provinciales: Gobierno, Seguridad, Infraestructura, Economía y Salud, junto con representantes del Ministerio Público y la Defensoría General. El objetivo de la audiencia es que las autoridades presenten propuestas concretas para revertir la crisis y garantizar condiciones mínimas de dignidad para los detenidos.

El Comité contra la Tortura marca que esta situación no solo infringe los derechos humanos más básicos de los detenidos, sino que también impide su posible reinserción social. "El sistema de justicia debe garantizar condiciones mínimas de dignidad, como ya sucede en la capital de Salta, donde no hay alojamientos permanentes en las comisarías. Este modelo debe ser extendido a toda la provincia", concluyó Solá en Aries.