¿De quién fue la culpa'

Desesperación, vómitos y bronca: el festejo de Reyes que terminó mal en Salta

Si bien no se presentaron casos extremos, todos los pacientes quedaron en observación.

Lo que parecía ser un acto solidario y emotivo, terminó siendo una pesadilla que hizo colapsar los hospitales del norte de Salta. Es que en el marco de un festejo por el Día de Reyes, unos 100 niños se intoxicaron al consumir productos en mal estado. 

Los niños de entre 6 y 12 años habrían participado de la actividad organizada por los curas de Misión San Francisco, a donde asisten más de mil niños. Fue así que, durante las horas de la siesta, los padres con los pequeños comenzaron a colmar la guardia del nosocomio colapsando el área.

El periodista local, Matías Saracho, relató a través de una transmisión en vivo en sus redes sociales el minuto a minuto de la llegada de los niños y niñas con sus padres al hospital, todos con la misma sintomatología.

La situación cobró ribetes aún más dramáticos, al no poder responder a la alta demanda de profesionales pediatras ni personal de asistencia, por lo que desde el hospital tuvieron que requerir la presencia de personal de APS y otros médicos del área privada y hasta de localidades cercanas como Urundel, General Mosconi, entre otras; develando de esta manera la precariedad del sistema de salud en la localidad del norte provincial y apelando inclusive a la comunidad sensibilizada por la situación para acercar donaciones de agua para asistir a los pequeños.

Según indicaron los padres de los niños intoxicados que asisten al comedor de verano de la escuela de Misión San Francisco, los menores habrían ingerido arroz con salsa y arroz con leche, alimentos cuya preparación o conservación no habría sido la ideal a causa de las altas temperaturas reinantes en la zona.

El informe de los profesionales arrojó que se trató de una intoxicación alimentaria, lo que produjo vómitos y diarrea, aunque, hasta últimas horas de la jornada de ayer, no se logró identificar los alimentos que habrían generado este malestar. Si bien no se presentaron casos extremos, todos los pacientes quedaron en observación y algunos fueron trasladados al Hospital San Vicente de Paul de Orán, como también a la localidad de Embarcación, nosocomios que respondieron inmediatamente.

Cabe señalar que pasadas las 19 de ayer, niños y niñas afectados continuaban llegando a la guardia hospitalaria, como también y en paralelo, la asistencia de vecinos que acercaron fundamentalmente agua potable para la hidratación frente a este cuadro, ventiladores y hasta colchones para permitirles pernoctar mientras se encuentran en estado de vigilancia médica.

Asimismo, y dada la gravedad de la situación, desde el Hospital, también solicitaban a la ciudadanía la donación de pañales para los más pequeños, consignó Nuevo Diario. 


Comentarios

  • PIPO

    Historias repetitivas..Hasta Cuando?.no hay cordón sanitarios ni médicos.

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