No es por ahí

Apretaron a Santi Maratea en Salta: "No sabía qué hacer, tuve un toque de miedo"

El influencer que consiguió camionetas 0KM y donaciones para comunidades wichí del norte salteño contó el momento que atravesó en su intento por ayudar solidariamente.

Matías Giliberti

Que Pasa Salta

Hasta hace unos días, Santiago Maratea era un desconocido para muchas personas en Salta, pero supo ganarse el reconocimiento y respeto luego de movilizarse para ayudar a familias en situación de vulnerabilidad social extrema que residen en la provincia. En las últimas horas debió enfrentar una serie de situaciones innecesarias que lo pusieron en un rol que tal vez nunca imaginó. Lo contó en sus historias de Instagram junto a fotos del momento. 

El influencer llegó este fin de semana con las camionetas que compró con donaciones de sus seguidores (Ford) y por gentileza de otra marca (Chevrolet). Además de un camión con miles de elementos para mejorar la calidad de vida de las comunidades wichí de Tartagal, Embarcación y alrededores. Lo que tal vez no esperaba es que su obra solidaria generara descontento. 

De acuerdo a su relato, Maratea se encontraba alojado en una escuela junto a Omar, su contacto en Salta quien también se movió para generar la campaña, cuando aparecieron personas desconocidas -provenientes de la localidad de Hickman- que reclamaban ayuda. El pedido lo sorprendió, ya que no se trata de un político o persona con funciones que le otorgaran el poder de dar respuesta inmediata. 

Tras dialogar con la gente, más adelante tuvo que vivir más momentos de tensión. Dirigentes de las comunidades (que se renovaron este fin de semana) lo interceptaron y manifestaron su desacuerdo con la forma en que se pensó la gestión de las donaciones. Ocurre que una de las camionetas sería convertida en ambulancia, pero luego se decidió usarla como un "centro de desnutrición móvil" que gestionaría la fundación Pata Pila. Esto no les gustó nada. 

Santi, con su buena predisposición, habló con los representantes originarios y les explicó que por cuestiones legales no podían simplemente dejarle los vehículos y que alguien debía "facturarlos". Uno de los elegidos era Omar y otro la fundación en cuestión. 

Lo más complicado vino después cuando apareció otro supuesto cacique y, en wichí, comenzó a incitar a la violencia. Ahí tuvo que retirarse con su equipo, acompañados por la Policía de Salta. 

La fundación Pata Pila finalmente se bajó del proyecto por considerar que traería conflicto a su obra benéfica. Ante ello, Maratea y sus colaboradores decidieron poner las camionetas a nombre de Omar, quien deberá incluso modificar su situación fiscal en AFIP para que todo esté más que claro. 

MIRÁ LAS HISTORIAS DE SANTI MARATEA Y SU DURO RELATO. 

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Comentarios

  • Pavo

    Los wichis son unos desagradecidos de m no los deberían ayudar un carajo. Pero después salen a llorar que los matan

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  • Joe

    Santi no mueva un dedo mas por esos indios no lo merecen

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  • PAL' BERMEJO TODOS.

    Basta de pueblos originarios, de comunidades aborigenes, de indios, de pobres, de indefensos, de desamparados. SON TODOS COMIDA DE PECES. Hay que mandarlos todos al río. Comparto la opinión de varios, son vagos, no aportan nada de nada ni a nadie. Si le preparas la tierra para que la laburen (como en los tiempos de los cazadores-recolectores) no lo harán, prefieren estar sentados todo el día, machaos, o violando a las mujeres y niñas de su propia comunidad. Ah! pero es su pasado que le permite hacer semejante aberración. Cuando les llevan donaciones de ropa usada o calzado, lo rechazan. Quieren todo nuevo, y cuando reciben lo nuevo...van y lo cambian por vino, cigarrillos y coca en el pueblo. HAY QUE PONER LAS COSAS EN SU LUGAR Y EL LUGAR DE ELLOS ES EN EL FONDO DEL BERMEJO.

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  • Facho

    El cacique la quiere para el a la camioneta jajaja y las donaciones igual

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  • Facho

    Asi son los indios, aparentan ser buenos pero no sirven para mierda

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  • Gratarola

    Vagos irredentos. Igual que los funcionarios del petiso, pero con subsidios, en vez de sueldos. Siga la dádiva y el clientelismo !!

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  • ana

    Lamentablemente, los porteños son demasiado idealista (trabajé con porteños un tiempo, por eso hablo). Luego, cuando vienen acá y ven con sus propios ojos cómo es la gente, especialmente lo aborígenes, se quieren dar la cabeza contra la pared. Que los indios le vayan a pedir ayuda de Leavy y la manga de mafiosos que siempre votan.

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  • El Gaucho Lunari

    Esos indios roñosos tienen mierda en lugar de cerebro. ¿Pa qué hacerse mala sangre por ayudarlos? Es al pedo empujar cuando la pija es corta, porque la concha se desespera y los huevos se hacen torta.

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  • Bolsonaro

    Los aborígenes de Argentina siempre fueron vagos viven de las cosas que les regalan

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  • Rafael Bruno

    A esa gente no hay que darle nada. Son parásitos. Pero peor los políticos que lo apañan.

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