Con el quinto caso de coronavirus, el intendente permitió a 10 personas hacer la cuarentena en R. de Lerma

Mientras los pedidos de renuncia al intendente Enrique Martínez se siguen acumulando, los vecinos de Rosario de Lerma han manifestado el miedo y la preocupación tras confirmarse que junto a la joven que contrajo COVID-19 y se encontraba en ese municipio, llegaron otras 10 personas.

Más allá de las denuncias por posibles irregularidades en los protocolos que se tendrían que haber tomado, la falta de información en el municipio no acerca tranquilidad a los ciudadanos. En este sentido, un documento evidencia que fue el propio Martínez quien autorizó el ingreso de al menos 10 trabajadores golondrinas de esa localidad que se encontraban alojados en la casa de retiros Juan XXIII de la UCASAL para cumplir la cuarentena en viviendas que el propio Ejecutivo Municipal habría "adaptado".

Lo cierto es que no solo se criticó la decisión, sino que a simple vista el concepto en el que se adaptó las viviendas no convenció a los rosarinos, ya que en el caso confirmado la vivienda puesta a disposición se encuentra en el barrio más popular de ese municipio, exponiendo y complejizando garantizar la seguridad de los habitantes.

"Nos reunieron para trasladarnos, yo viaje con 10 personas en un colectivo de SAETA el 30 de abril, cada uno fue aislado en un domicilio que ellos eligieron", contó la joven que se encuentra internada en el Hospital Papa Francisco de la Ciudad de Salta. 

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