Años de ocultismo, un allanamiento: la iglesia no mira el rostro de los sobrevivientes

Cual embajada del Vaticano, la Iglesia Católica salteña ha sabido orquestar y participar en las decisiones políticas, y como si esto fuera poco, ha recibido largos años de impunidad garantizada para sus miembros poniendo un grotesco manto de silencio y olvido sobre los más aberrantes actos, abusos sexuales, acoso, pedofilia y hasta pederastia.

Días atrás, el allanamiento al arzobispado, despierta la esperanza de que no todo quede debajo de la alfombra y la justicia se decida a avanzar sobre estos "ministros agraciados de la fe". Lo cierto es que hasta el momento no hay mayor información sobre los resultados de este y apenas si hemos podido dar a conocer la elevación a juicio de la religiosa María Alicia Pacheco, quien integraba la banda del cura Agustín Rosa Torino, ambos denunciados por abuso sexual. 

Lo curioso es que de la causa contra el sacerdote, se sigue esperando avances y poco se sabe si llegará a juicio, o se encontrará con algún juez amigable como Augusto Figueroa, quien entre otras cosas sobreseyó al sacerdote José Carlos Aguilera de la causa en la que se lo investigaba, también por abuso sexual, ya que consideró que la causa esta prescrita, es decir, se le pasó el tiempo.

En nuestra provincia recordaremos casos puntuales donde sacerdotes denunciados han sido tocados por la varita de la impunidad, o que simplemente sus expedientes duermen en algún apretado cajón de la Ciudad Judicial. Es común que la cúpula eclesiástica, dirigida por el monseñor Mario Antonio Cargnello los traslade a una lejana congregación para que sigan gozando de todos sus beneficios, quizás con mayor discreción.

Cargnello dijo a Macri "llévate el rostro de los pobres, merecen que nos pongamos de rodillas delante de ellos". Lejos de querer defender al mandatario argentino, sería interesante que nuestro arzobispo se lleve el rostro de los sobrevivientes y cada rasgo del aberrante sufrimiento al que fueron sometidos. En el caso de ellos, merecen justicia.

Hagamos un repaso por la historia de estos pescadores de hombres, y algo más. En una publicación de Infobae se detallan 62 religiosos acusados de abuso, de estos 5 son salteños, pero no serían los únicos.

La lista actualizada

1. Alessandro De Rossi. Acusado de abuso a niños entre 2008 y 2013, cuando era párroco en un templo de Salta capital. Detenido en Roma en 2014, se negó la extradición por falta de pruebas y fue liberado seis meses después.

2. Martín Paz. Separado de sus funciones eclesiásticas en mayo de 2003 por el arzobispo de Salta, monseñor Mario Cargnello, por abusar en Catamarca de una chica de 17 años que quedó embarazada. Hubo denuncia penal pero no fue investigado.

3. Agustín Rosa Torino. Espera en libertad que la causa prospera. Fue denunciado por dos ex novicios. Tiene 25 denuncias canónicas por abuso, corrupción y enriquecimiento ilícito. Tiempo después se lo relaciono con el narcotraficante Joquín "el chapo" Guzman, y el cartel de Sinaloa.

4. Nicolás Osvaldo Parma Vega. Denunciado por abuso sexual pero aún no fue investigado. Pertenece a la congregación del sacerdote Agustín Rosa Torino.

5. María Alicia Pacheco. Era colaboradora de otro cura abusador, Agustín Rosa Torino. Detenida desde diciembre de 2016 por abuso reiterado de una nena de 13 años en Salta. Su causa fue elevada a juicio.

Y sigue la cuenta

La lista crece constantemente, los abusos dentro de la Iglesia Católica de Salta ya son un escándalo de importante magnitud que muchos prefieren silenciar. La indiferencia por parte de la sociedad en general, crea el escenario perfecto para que la varita de la impunidad haga el resto.

6. Gustavo Zancheta. Fue obispo de Orán y luego trasladado al Vaticano donde manejo todos los bienes de la Santa Sede, cargo del que fue separado al iniciarse las investigaciones por abuso sexual en la congregación que dirigía, además de un instituto que él representaba. La investigación quedó a cargo del arzobispo de Tucumán, Carlos Sánchez.

7. Valeria Zarza. Ex colaboradora de Agustín Rosa Torino. Fue una de las denunciantes contra el cura Rosa Torino de un hecho que habría ocurrido en México, pero su denuncia fue desestimada. Fue testigo y acompaño a una denunciante, y en cuestión de días se convirtió en denunciada por un abuso que habría cometido contra una niña de 5 años en Lumbreras.

8. José Carlos Aguilera. Estuvo imputado por abuso sexual gravemente ultrajante y abuso sexual simple. Fue sobreseído por el juez Adolfo Figueroa, quien consideró que la causa estaba prescrita.

9. Emilio Lamas. Denunciado por casos de abuso sexual cometidos hace 28 años en la Iglesia de Rosario de Lerma. A diferencia de José Carlos Aguilera, el juez Antonio Silisque rechazó el recurso de prescripción. Hace pocos días, la lucha de los sobrevivientes logró un operativo inédito en el que la Justicia ordenó el allanamiento del arzobispado en Salta.

Para la paz hace falta más que un sermón. Esta nueva etapa propone un acercamiento de la Justicia salteña para con los sobrevivientes que se atrevieron a denunciar y contar los más terribles momentos que pueda vivir un niño. La curia es sacudida por la fuerza de quienes decidieron no callar más y todos aquellos que esperan que su credo se comporte acorde a la forma en la que se presenta en sociedad. Un camino a la justicia.