Cada año, cerca de 120.000 argentinos sufren un ACV: qué es
En el Día Mundial del Accidente Cerebrovascular, recordamos la importancia de la educación y la intervención rápida para salvar vidas y mejorar la calidad de vida de quienes sufren esta afección.
El Día Mundial del Accidente Cerebrovascular (ACV) es una oportunidad para concienciar sobre una de las principales causas de discapacidad y muerte en Argentina y el mundo. Cada año, aproximadamente 120 mil argentinos sufren un ACV, lo que destaca la necesidad de estar informados sobre esta condición que puede causar discapacidades temporales o permanentes.
Un accidente cerebrovascular, también conocido como ataque cerebral, ocurre cuando se detiene el flujo sanguíneo hacia una parte del cerebro. Sin el suministro de oxígeno y nutrientes, las células cerebrales comienzan a morir en minutos, lo que puede causar daños severos, discapacidades permanentes e incluso la muerte.
"Un accidente cerebrovascular es una emergencia médica que requiere atención inmediata. La educación sobre los síntomas, los factores de riesgo y la intervención rápida es vital para mejorar los resultados y reducir la morbilidad asociada con esta afección. La prevención, a través del manejo de factores de riesgo, es fundamental para reducir la incidencia de ACV. Obtener atención médica de emergencia rápidamente puede reducir el daño en el cerebro y otras complicaciones que genera un accidente cerebrovascular", explica el Dr. Marcelo Cáncer, cardiólogo de OSPEDYC.
Los factores de riesgo incluyen:
- Edad superior a 55 años.
- Antecedentes familiares o personales de enfermedades cardíacas.
- Fumar.
- Hipertensión arterial.
- Sobrepeso y sedentarismo.
- Colesterol alto (dislipemia).
- Diabetes no controlada.
- Consumo excesivo de alcohol y drogas de abuso.
- Apneas del sueño.
Tipos de ACV
- Isquemia Cerebral: Causada por la obstrucción de una arteria que lleva sangre al cerebro, representa el 85% de los ACV.
- Hemorragia Cerebral: Ocurre cuando un vaso sanguíneo del cerebro se rompe, causando sangrado que daña las neuronas.
Síntomas de un ACV
Es crucial reconocer los síntomas para buscar ayuda inmediata:
- Dificultad para hablar y entender: Confusión, arrastrar las palabras o no entender el habla.
- Entumecimiento o debilidad: Afecta solo un lado del cuerpo, caída de un brazo o un lado de la boca.
- Problemas de visión: Visión borrosa o doble en uno o ambos ojos.
- Dolor de cabeza: Repentino y muy intenso, acompañado de vómitos o mareos.
- Problemas para caminar: Pérdida de equilibrio o coordinación.
Tratamiento
El tratamiento varía según el tipo de ACV:
- ACV Isquémico: Requiere la recuperación del flujo sanguíneo mediante terapia trombolítica o procedimientos como la angioplastia.
- ACV Hemorrágico: Incluye medidas para controlar la presión arterial y, en algunos casos, cirugía.
Un ACV puede causar diversas complicaciones, dependiendo de la duración y la zona afectada del cerebro:
- Pérdida de movimiento muscular o parálisis.
- Problemas para hablar o tragar.
- Pérdida de la memoria o dificultades cognitivas.
- Síntomas emocionales, como depresión o dificultad para controlar emociones.
- Dolor y sensaciones anormales.
- Cambios en la conducta y autocuidado.
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