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Qué es la Loratadina: el antialérgico que todos compran en otoño y primavera

La loratadina es un fármaco antihistamínico prescrito para tratar diversos síntomas.


La loratadina, un antihistamínico de venta libre, es un medicamento ampliamente utilizado para tratar síntomas asociados con reacciones alérgicas y resfriados, como estornudos, congestión nasal, picazón en la garganta y ojos llorosos. Este fármaco se descompone en el cuerpo en desloratadina, otro antihistamínico utilizado bajo prescripción médica. Aunque la loratadina es un medicamento comúnmente utilizado, surgen dudas sobre su seguridad durante el embarazo y la lactancia.

Se desconoce si la loratadina puede dificultar la concepción o aumentar el riesgo de aborto espontáneo. Los estudios en animales no han mostrado efectos negativos en la fertilidad, y un estudio en humanos no encontró un aumento en la probabilidad de aborto espontáneo en personas que tomaron loratadina durante el primer trimestre del embarazo.

En cuanto a los defectos de nacimiento, algunos estudios han sugerido una posible asociación entre la loratadina y la hipospadias, una condición en la que la abertura del pene está en la base en lugar de en la punta. Sin embargo, otros estudios no han respaldado esta asociación, y no se espera que la loratadina aumente el riesgo de otros problemas relacionados con el embarazo, como el parto prematuro o el bajo peso al nacer.

La alergía es uno de los males que termina afectando a miles de personas durante otoño, invierno y primavera.

Durante la lactancia, la loratadina pasa a la leche materna en pequeñas cantidades, pero se cree que estas cantidades son demasiado bajas para causar problemas en el bebé. Además, la loratadina tiene menos probabilidades de causar somnolencia en comparación con otros antihistamínicos, lo que la convierte en una opción preferida para su uso durante la lactancia.

En resumen, aunque existen algunas preocupaciones sobre el uso de loratadina durante el embarazo y la lactancia, los estudios sugieren que es poco probable que cause problemas graves. Sin embargo, es importante hablar con un proveedor de atención médica antes de usar cualquier medicamento durante el embarazo o la lactancia para evaluar los riesgos y beneficios individuales.

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