El drama del hijo del Potro Rodrigo: no le alcanza ni para comprar una pizza

Ramiro Bueno, hijo del Potro Rodrigo, ya es todo un hombre. Con 19 años, entrena todos los días y, por la noche, estudia periodismo deportivo. Sin embargo, él y su familia llevan una vida sacrificada. Lejos de lo que podría pensarse, su situación económica es bastante ajustada. Así lo publicó diario El Intransigente. 

Ramiro tenía apenas 3 años cuando fue el accidente. Se crió sin su papá y decidió no seguir sus pasos en el ámbito laboral. A 15 años de la muerte del Potro, su hijo contó cómo vive.

El futbolista de El Porvenir, reveló que a menudo recibe señales de su papá. Por ejemplo, justo al momento del brindis de fin de año, Crónica pasó un video de su papá y al verlo él y su mamá (Patricia Pacheco) se largaron a llorar."Un chico estaba escuchándolo sin auriculares. Me pregunto cómo puede ser, busco explicaciones todo el tiempo", reveló sobre el día en el que lo ficharon en el club en donde juega.

"Me hace bien, me pone contento. Las que más me gustan son Amor clasificado y La novia de Dios", dijo sobre las canciones de su papá. "Ella está muy triste, nadie le va a devolver a su hijo. Yo me crié sin papá, pero es distinto, a ella le sacaron un pedazo de cuerpo", dijo sobre Beatriz Olave.

Acerca de sus aspiraciones laborales, comentó qué es lo que busca: "Quiero tener una carrera que me respalde el día de mañana", aseguró. 

Sin embargo, la situación de él y de su familia no es fácil y el dinero escasea.  "Cuidamos los gastos, no sobra nada. A veces se complica llegar  a fin de mes. Si comemos pizza, es una excepción. Mi mamá hace artesanías y cuida a mis hermanitas", reveló.

¿Y por qué no sigue los pasos de Rodrigo?. "Me encanta la música, pero elegí otro camino. Para mí cantando soy un desastre. Sé que podría hacer mucha plata, también me ofrecieron entrar a Gran Hermano, pero no es lo que busco. No puedo dejar la facultad o renunciar al fichaje en el club para meterme en un reality", explicó.

"Busco sacrificarme y mostrar que hay que pelear por lo que uno quiere. Si estás ayudado por el apellido es fácil, y no quiero que me caiga del cielo", dice el joven que quiere brillar por sí mismo.

Ramiro Bueno, hijo del Potro Rodrigo, ya es todo un hombre. Con 19 años, entrena todos los días y, por la noche, estudia periodismo deportivo. Sin embargo, él y su familia llevan una vida sacrificada. Lejos de lo que podría pensarse, su situación económica es bastante ajustada. Así lo publicó diario El Intransigente.