Dos periodistas muy queridos de TN se pelearon feo ¡Al aire!

"Riflito…", le dio el pie Mario Massaccesi y El Rifle Varela inició, como cada medianoche, su columna de En Síntesis. El futuro de la Selección -con su magro presente- era tema obligado ya en los primeros minutos de este viernes. Y entonces el periodista deportivo barajó los posibles escenarios para el duelo con Perú por las Eliminatorias, el 5 de octubre: las canchas de River, Boca o Central.



"¿Y por qué no el Monumental?", indagó el conductor. Un silencio de varios segundos fue la respuesta inicial, seguida por otra frase del columnista: "No… ¿Vos me escuchás cuando hablo?". "Sí, te estoy escuchando". "La primera opción que te dije fue River en el Monumental". "Ajá", dijo Massaccessi. "¡Ajá!", retrucó Varela.



Acto seguido, empezaron a debatir sobre las distintas posibilidades. "Dicen que tienen más chances Boca o Central", precisó Mario. "¡Mentira!", descartó El Rifle. "Vos decís una cosa -agregó el conductor-, pero yo consulté con otros periodistas deportivos y dicen (que los jugadores) quieren tener a la hinchada más cerca". Ya sin pretender disimular su fastidio, el columnista bramó: "Listo, bueno, levantá la columna…". Más silencio.



"Dale, seguí", arengaron de un lado. "No, no, hablá con las autoridades del canal y llamá a otro periodista deportivo", desafiaron del otro. "Yo tengo mis fuentes, disculpame". "Sí, seguro…". Otro bache. "¿Ya está?". "No voy a seguir". "Muy bien". El informe de Varela se diluyó entre imágenes de un partido de la Selección pero sin otra palabra más.



A los pocos minutos El Rifle tuvo una nueva salida aunque sin la presentación de Massaccesi: esa circunstancia estaba pautada de antemano. Luego se levantó de su silla y se fue, lo que también era previsible: lo hace cada noche para ir a TN. Pero ni siquiera se saludó con su compañero, con quien no volvió a cruzar palabras tras el entredicho.



Quienes quedaron en el panel se miraron con desconcierto. "¿Fue una joda esto? ¿O fue en serio?", se escuchó decir. Nadie comprendía el enojo de Varela. Hasta el pasado jueves, su relación con Massaccesi transcurría en absoluta armonía.