Un goleador le pidió hasta $150 por mes, y Gimnasia encontró uno por “2 pesos”

En este mercado de pases los precios están cada vez más arriba y así se hace casi imposible para los clubes contratar goleadores con este despiadado sistema económico. A Gimnasia y Tiro, por ejemplo, le llegaron a pedir 150 mil pesos por mes de sueldo, algo que lógicamente fue rechazado por inalcanzable.

Aún así el club se dio mañas para contratar delanteros con poder de fuego, según los antecedentes con los que vinieron al club de la Vicente López. Duilio Botella le dio el ok a los delanteros Luis Rivero, Alejandro Toledo, Miguel Alba y el Tanque Garavano, los cuáles tienen rodaje en la divisional, también en la B Nacional y en el fútbol del exterior, como el caso de Alba, que viene de jugar en el fútbol de Malta.

El equipo viene jugando amistosos, y en estos partidos el técnico Botella descubrió a una “joyita”. Se trata de Luciano Herrera, el juvenil delantero que es hijo de Venancio Herrera, aquél lateral izquierdo que logró los dos ascensos con Gimnasia y Tiro.

Luciano estuvo jugando en varios clubes de Buenos Aires antes de recalar en las divisiones menores de la Vicente López de la mano de su padre. Se desempeña como centro atacante y comenzó en el club jugando el Anual, donde Botella le echó el ojo y lo subió a jugar con el plantel que jugará el Federal B.

Como todo jugador que sube, primero pagó derecho de piso comiéndose el banco de suplentes, aunque luego comenzó a sorprender con su rendimiento en los partidos. Y según se pudo apreciar los equipos que para el técnico de un tiempo a esta parte, todo hace suponer que Luciano puede cumplir el sueño del pibe y podría arrancar de titular en el debut del equipo. Botella lo viene probando en dupla con Alba.

Habrá que ver que es lo que ocurre con este juvenil jugador de 21 años y un porte importante para el puesto. Por ahora los dirigentes vieron en él las condiciones como para triunfar es por eso que, ni lerdos ni perezosos, ya le hicieron un contrato por dos años.