Los Pumas volvieron a cumplir con la sana costumbre de ganarle a Francia

Globalmente, la victoria de los Pumas por 30-19 ante Francia quizá no haya respondido a una performance sólida. En todo caso, al equipo nacional le alcanzó con destellos de lucidez para apoyar tres tries y marcar diferencias, en un encuentro disputado ante unos 18.000 espectadores en el estadio de Atlético Tucumán. El desquite de esta serie se disputará el sábado próximo, en el mismo escenario.

Más allá de la inconsistencia, quedaron en evidencia los frutos de la intención de jugar siempre y el poderío ofensivo de este plantel, potenciado por la participación de los Jaguares en el Super Rugby. Además, la victoria es importante para sumar confianza y escalar posiciones en el ranking mundial de cara al sorteo del Mundial. Si bien este ordenamiento se hará en marzo de 2017, se tomarán en cuenta la clasificación de diciembre próximo, por eso serán importantes los resultados que se consigan en este semestre.

En los pasajes en los que los Pumas consiguieron imprimirle dinámica al juego lograron quebrar a un equipo inexperto, pero muy prolijo. Nuevamente los penales cometidos (14 en total, 12 de los cuales fueron en los primeros tres cuartos del encuentro) fueron el punto débil de los argentinos, lo que le permitió a Francia estar en partido casi hasta el final.

Dos buenas acciones de los backs terminaron en los tries de Montero y Tuculet, y a los 24 minutos los Pumas ganaban por 17-3. Parecía que tenían potencial para quebrar a los franceses cuando se lo propusieran, pero en cambio fue Francia el que asumió el protagonismo.

Al contrario de lo esperado, los galos intentaron jugar de todos lados y desnudaron la peor falencia de los locales: la indisciplina. Con un try de maul que sucedió a un penal y la puntería de Jules Plisson, dieron vuelta el partido hasta adelantarse 19-17. Parecía que la única forma de detenerlos era cometiéndoles penal, y hasta Ortega Desio fue amonestado por las reiteradas infracciones.

Pero los Pumas se recompusieron. Sánchez acertó un par de penales de larga distancia (también falló otros tantos) para recuperar la ventaja y sellaron el triunfo con una obra maestra de dos forwards que se disfrazaron de tres cuartos: Tetaz Chaparro embistió por el centro de la cancha y dio un pase en el contacto interno a Guido Petti, que corrió a toda velocidad hasta apoyar debajo de los palos.

Las formaciones

Argentina: Joaquín Tuculet; Santiago Cordero, Matías Moroni, Juan Martín Hernández y Manuel Montero; Nicolás Sánchez y Martín Landajo; Tomás Lezana, Facundo Isa y Pablo Matera; Javier Ortega Desio (A) y Guido Petti; Ramiro Herrera, Agustín Creevy (c) y Nahuel Tetaz Chaparro.

Cambios: PT: 20m, Santiago González Iglesias por Juan Hernández. ST: 16m, Juan Manuel Leguizamón por Lezana; 22m, Cubelli por Landajo.

Entrenador: Daniel Hourcade.

Suplentes: Julián Montoya, Santiago Gracía Botta, Enrique Pieretto, Ignacio Larrague, Juan Leguizamón y Ramiro Moyano.

Francia: Hugo Bonneval; Xavier Mignot, Julien Rey, Jonathan Dantyy Djibril Camara; Jules Plisson (c) y Baptiste Serin; Raphaël Lakafia, Kevin Gourdon y Loann Goujon; William Demotte y Julian Ledevedec; Rabah Slimani, Rémi Bonfils y Jefferson Poirot (A).

Entrenador: Guy Novés.

Suplentes: Clément Maynadier, Uini Atonio, Lucas Pointud, Fabrice Metz, Louis Picamoles, Sebastien Bézy, Francois Trinhduc y Gaël Fickou.

Primer tiempo: 9m, penal de Plisson (F); 16m, penal de Sánchez (A); 20 y 30m, goles de Sánchez por tries de Montero y Tuculet (A), y 33m, gol de Plisson por try de Bonfils (F).

Segundo tiempo: 4, 10 y 13m, penales de Plisson (F); 20m y 24m, penales de Sánchez (A); 34m, gol de Sánchez por try de Petti (A).

Arbitro: John Lacey (Irlanda)

Estadio: Atlético Tucumán

Amonestados: Javier Ortega Desio (Argentina, 6m ST), Jefferson Poirot (Francia, 20m ST).