¿Cómo frenar la violencia verbal de los padres en los partidos de inferiores?

Continuando con nuestra serie de notas sobre el tema, Tiro Libre charló con Raúl Sardinas, presidente de Cachorros y coordinador del fútbol infantil en la Liga Salteña de Fútbol. “Estamos trabajando en un tema que nos preocupa a todos”, señaló el dirigente a Tiro Libre. “Vamos a realizar charlas con los padres, a repartir folletos en las canchas e implementaremos el saludo fair play de los equipos antes de los partidos. Queremos hacer docencia en este aspecto y educar a los chicos y también a los papás”, señaló el dirigente.

El tema “violencia” está relativamente controlado en lo que hace a las divisiones inferiores que organiza la LSF, pero se desmadra en algunos partidos de la categoría “infantiles”, dado que este certamen es abierto y pueden participar los barrios, además de los equipos federados. Esto implica que los barrios llevan gente que, en determinados casos, tienen enemistad barrial con el rival y se termina conformando un coctel complejo.

“Los reiterados hechos naturalizaron a la violencia, lamentablemente. Pero para la LSF es algo que nos preocupa profundamente. Una cosa es cuando jugadores de equipos profesionales discuten y se van a las manos por circunstancias del juego, y otra es que un chico en etapa de información conviva con hechos que sus propios padres generan del otro lado del alambrado”, explicó el directivo.

Sardinas es presidente de Cachorros, un club que siempre se preocupó por la formación del chico. Y aquí vale la pena rescatar un ejemplo: cuando le ganaron la final por el ascenso a San Francisco Bancario, todos los jugadores fueron a saludar al rival vencido y a felicitarlo por su entrega. Además de esto, le dieron la mano al técnico Mendía y le agradecieron el haberlos tenido en cuenta. “Gracias Profe por hacerme jugar”, le dijeron mientras lo abrazaban. Esto se llama “formación”, y eso es lo que falta en muchos casos.