Brujo Manuel, vos que sos un capo, ¿te animás a venir el sábado por la Entre Ríos?

El directivo, el técnico  el jugador y ni hablar del hincha, harían lo imposible para que su equipo gane ese partido que les quita el sueño. Y en esto de darle todo son capaces de promesar que correrán desnudos por la ruta a Güemes, o que no verán a su novia para no caer en excesos carnales, o de no tomar alcohol por un par de horas.

Todo vale a la hora de implorar que el equipo pueda salir airoso de un compromiso como el que tendrán, por ejemplo, Central Norte con Pellegrini. El que gane jugará la final del ascenso, instancia a la que el Cuervo quiere llegar para tener revancha de la que perdió el torneo pasado ante los mendocinos, mientras que los de Pelle corren detrás de un sueño.

Pero el petitorio al Brujo Manuel alcanzaría, además, a muchos funcionarios, los que pedirán que no pase nada en la cancha de Central Norte, y que la tarde comience y termine en paz.

Implorará Acosta para que Ceballos aparezca en un partido complicado, para que Maino saque esas pelotas como tan sólo él sabe hacerlo, y que la Perla Reyes vuelva con un gol del triunfo bajo del brazo.

Suplicará Acuña, para que a su equipo vuelvan a salirle todas, que los remates vayan al ángulo y para que el árbitro no se le caigan los pantalones con el clima de la tribuna.

Y suplicaremos todos para que el ganador de esta semi, cualquiera fuere, pueda ganar la final y darle al fútbol salteño un baño de alegría ante tanta malaria.

Dale, Manuel, no es tanto lo que te pedimos. Si pudiste clasificar a la Selección al Mundial, ¿qué te cuesta llegarte por Salta?