A 12 años de su muerte, el automovilismo salteño todavía llora a Nicolás Vuyovich

La muerte de Nicolás Vuyovich dejó una herida abierta en el deporte salteño que todavía no cicatriza. Hace 12 años, una tragedia aérea se cobraba la vida del joven piloto que vivía un gran presente y que tenía una notable proyección. Ya a los 23 años se había consolidado en el automovilismo nacional y gozaba de prestigio entre sus colegas. Los que lo conocieron desde chico aseguran que ya tenía pasta de campeón cuando corría en karting y nada fue de casualidad.

Oranense de nacimiento, Nicolás había descollado en el Turismo Nacional (campeón en las Clases 2 y 3) y se lucía en el TC 2000 cuando encontró la muerte ese nefasto 8 de mayo de 2005. Como paradoja del destino, durante la mañana de esa trágica jornada había obtenido en San Juan el primer puesto a bordo de su auto del equipo "Toyota Team Argentina".

Su corta pero intensa carrera deslumbró a propios y extraños y rápidamente se convirtió en un ídolo del deporte salteño. Por eso su inesperada muerte conmovió a todo el ambiente y aún hoy se lo recuerda con mucho cariño y nostalgia.

No obstante, su hermano Pablo agarró la posta y se consolidó en los últimos años en el automovilismo nacional. A fines de 2015 se quedó con el título en la Clase 3 del Turismo Pista y actualmente compite en el TC 2000, la última categoría donde corrió Nicolás.

Cabe recordar que en el accidente aéreo murieron seis personas y en febrero del año pasado el Tribunal Federal Oral N° 2 absolvió a los tres acusados por la caída del avión Piper Navajo ocurrida en el Aeropuerto Taravella de la ciudad de Córdoba (ver link).