Publicó una selfie en el baño y terminó presa: un detalle hizo que se sepa la verdad
La mujer nunca imaginó que la fotografía sería compartida en redes sociales y revelaría a las autoridades el delito que había cometido.
Michael y Heather Jones, son una pareja de la ciudad de Kansas en Estados Unidos que han sido sentenciados a cadena perpetua por la tortura y muerte de su pequeño hijo de solo 7 años, Adrián.
Durante años, y sin motivo aparente, esta pareja abusó de su hijo con torturas, hostigamiento y negación de los alimentos por parte de sus padres, quienes fotografiaban cada uno de los actos que cometían.
La pareja se preocupó de borrar todos los rastros de la muerte de Adrian, al punto de lanzar sus restos a los cerdos para que no quedara huella de su muerte, pero guardaron las fotos que tomaron.
En las cruentas imágenes, se puede ver al menor ensangrentado y con heridas en todo su cuerpo, luego de ser atado por horas a una superficie de metal.
También, en otras ocasiones, era forzado a permanecer durante la noche en una sucia piscina, sin poder salir.
Cuando le daban comida, la mezclaban con trozos de metal y madera, que le provocaban dolorosas heridas en su boca y lengua.
Adrián dormía en la bañera de la casa, la cual estaba cubierta con una madera para que el niño no escapara durante la noche. En otras ocasiones lo hacían dormir afuera de la casa, a la intemperie.
El sector donde se encontraba su casa está aislado de la ciudad, lo que ayudó a que estos horribles crímenes pasaran desapercibidos, hasta que la dueña de la casa que arrendaban, vio las impactantes fotos en el computador de Heather y alertó a la policía, pero ya era demasiado tarde, ya que el niño ya había fallecido.
Fotos TKM
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