Estos son los tres signos que más intuición tienen

La astrología significa nuestro origen estelar asociando las diferentes personalidades con los distintos elementos que encontramos en la naturaleza: fuego, tierra, aire y agua. Cada uno de los doce signos zodiacales pertenece a alguno de ellos. Los cuatro elementos se dividen a su vez en dos sub grupos: masculinos o de acción explícita - el fuego y el aire-;  y femeninos o de receptividad nutriente -la tierra y el agua-.



Las mujeres con énfasis en elementos femeninos serán sensibles, resonantes y receptivas a las necesidades de su entorno. En particular las  damas de agua están hechas de un elemento extremadamente adaptable que les da máxima sensibilidad y permeabilidad. Si observamos al Agua comprenderemos  mejor a las mujeres de este elemento: recorre tres estados diferentes (sólido, líquido y gaseoso); simbolizando sus cambiantes personalidades. Tal como el agua -que toma la forma de aquello que la contiene- son empáticas y  resuenan con las necesidades del prójimo. El agua también será insípida (no tiene sabor), incolora (no tiene color) e inodora (no tiene olor). Estas características podrán ser tanto sus  talentos como sus dificultades: pertenecen a un elemento que toma el color y el sabor de los otros: esto las convierte en sujetos extremadamente permeables a las necesidades ajenas.



El agua es el líquido primordial en el que todos habitamos pues nos conecta con nuestro origen, con el útero que nos dio vida.  Las personas de agua están ligadas con su origen, resonando especialmente con sus tradiciones y relatos familiares.  El agua es también el alimento primero, refrescante y esencial, ellas nutren la sensibilidad propia y ajena e intuyen lo fundamental. Tienen el don de la compasión, estimulan la ternura y el contacto profundo con la memoria del alma.  



Las mujeres de agua estarán regidas por tres estereotipos diferentes según sean de Cáncer, de Escorpio o de Piscis.



Las mujeres de Cáncer: las "protectoras"



Cáncer es agua cardinal y posee una sensibilidad accionadora. Responden al estereotipo de la "madre". La naturaleza canceriana es aquella que fácilmente cuida, protege y nutre. La capacidad guardiana y nutritiva de Cáncer es necesaria – e inclusive valorada- cuando hay personas vulnerables y necesitadas pero también puede complicar o infantilizar los vínculos de pareja o  generar extrema dependencia y control en situaciones donde se hace necesario mantener vínculos de “paridad”. El desafío para las cancerianas suele ser permitir que otros crezcan, aprender a soltar a los más amados para que sigan su camino de manera más independiente.



Las mujeres de Cáncer  deben aprender a confiar en su cualidad protectora estando siempre atentas a que su tendencia a proteger no monopolice sus acciones. Su gran desafío será superar la fantasía de que si los otros no las necesitan, las abandonarán. Retarse a aprender a explorar vínculos que se consolidan por elección creativa y no por necesidades.



Las mujeres de Escorpio: las "terapeutas"



Escorpio es agua fija y posee una sensibilidad auto centrada y aglutinante. Responden al estereotipo de la "curadora". Tiene el talento de captar aquellas emociones que el resto pretende esconder o disimular. Su naturaleza es descubrir lo negado pero les resultará fundamental aprender a desarrollar este talentos en “tiempos, tonos y modos” correctos. Comunicar sus profundas percepciones desde su intensa mirada puede ser extremadamente sanador si encuentran una forma sutil de hacerlo para evitar dolor, conflictos o antipatías.



Si las Escorpianas aceptan que no todo el mundo está dispuesto a escuchar sus intensas percepciones, es probable que se conviertan en  seres profundamente sanadores, el desafío para ellas será respetar los tiempos y las necesidades de los procesos ajenos.



Las mujeres de Piscis: las "intuitivas"



Piscis es agua mutable y posee  una sensibilidad inquieta y versátil. Responden al estereotipo de la "medium". Las piscianas han nacido con un gran radar siempre activo que capta las necesidades del mundo mucho más de lo que cualquier ser humano “normal” podría soportar. En general intentan construir una personalidad reactivamente racional como modo de defensa de esta gran percepción natural que poseen y es por esto que pueden volverse excesivamente duras cuando en verdad lo de ellas es la ternura y la compasión.



Si logran reconocer su extrema sensibilidad podrán confiar en activar sus talentos de hechiceras antes que aferrarse a su parte racional. Recién aceptando su maravillosa percepción podrán utilizarla en beneficio propio y ajeno. Hasta que Piscis no acepte explorar su gran conocimiento del alma humana desde lenguajes esotéricos, desde el arte o desde la música seguirá padeciendo su propia tiranía mental que solo las mantiene alejadas de sus amorosos tesoros personales. 

La información fue publicada en el sitio Entre Mujeres.