Morirse cuesta caro
"Para pedir un cajón hay que ir con escribano público", la acusación de un concejal
Alberto Castillo se refirió al programa que lleva adelante el Municipio para brindar un sepelio digno a vecinos carenciados.
Durante la sesión de esta tarde en el Concejo Deliberante, Castillo denunció que para solicitar un ataúd se le está pidiendo a los vecinos declaraciones juradas certificadas ante escribano público.
"Para pedir un cajón hay que ir con escribano público, con lo que eso implica para la familia de la persona fallecida. Si alguien muere a las 23 hs. es muy difícil que se tenga un escribano a esa hora", señaló.
"La sala de velatorio que está en el cementerio de la Santa Cruz no está disponible para los vecinos, se está cayendo a pedazos. La Municipalidad entrega los cajones pero lo único que encuentran los salteños son trabas para tener un sepelio digno", concluyó.
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