El plan de Macri

Lo que se viene: más ajuste en provincias y jubilaciones privadas

Como lo plantea OCDE, la Casa Rosada impulsará menos tributos locales, nuevas formas de contratación de empleados y seguros de retiro optativos.

“Las pensiones son elevadas en comparación con el salario”. Así lo definió una evaluación de la OCDE, el Organismo para la Cooperación y el Desarrollo Económico al que sueña con ingresar el Gobierno y en el que ya está dando sus primeros pasos, al ritmo de sus recomendaciones.



De mejor alumno del Fondo Monetario Internacional (FMI), la Argentina pasó a ser el mejor aspirante a la OCDE. La semana pasada, el Gobierno presentó una reforma tributaria y se dieron a conocer los lineamientos de la reforma laboral y la jubilatoria, todo en sintonía con lo que pensó el organismo que dirige Angel Gurría y que establece estándares promedio para un conjunto de naciones desarrolladas y algunos países de la región, como México y Brasil. Incluso las sugerencias del organismo incluyen el método de presentación de las medidas: un paquete que pueda negociarse en conjunto.



Seguro de retiro. Entre las políticas en estudio en el oficialismo para el sector de jubilaciones y pensiones, está la idea de un sistema voluntario de aportes privados, un esquema que ya adoptaron varios países de este club. En el mientras tanto, el organismo advierte que el sistema argentino “no es sustentable” tal como está planteado hoy y recomienda que las jubilaciones “se ajusten por el índice de precios al consumidor”, así como se planteó esta semana, con la idea de dejar atrás la fórmula de movilidad –que vincula otras variables además de la inflación, como la evolución de la recaudación– para “que no pase lo que pasó el año pasado”, según el jefe de Gabinete Marcos Peña, cuando las jubilaciones perdieron en ingresos después del salto de precios que siguió a la devaluación del 40% de diciembre de 2015.



Otra de las recomendaciones de la OCDE para la reforma jubilatoria es “alinear la edad de retiro de las mujeres con los hombres”, lo que lejos de acortar el plazo para los hombres implica estirar el de las mujeres, de 60 a 65 años. Incluso el proyecto oficial podría extender la edad de los varones a 68 años según las opciones que se barajan.



A mediados de año se presentó un Estudio económico multidimensional elaborado por la Organización. En ese momento, se reunieron Gabriela Ramos, directora de Gabinete de la OCDE y Sherpa del G20, y Nicolás Dujovne, ministro de Hacienda, donde sugería las reformas que se fueron anunciando: mercado laboral, política tributaria, infraestructura, apertura comercial y reforma del mercado de capitales. También recomendaba la desregulación del sector energético que se materializó en los combustibles. Por otro lado, aunque no fue uno de los anuncios del Gobierno hasta el momento, la OCDE también considera que hay que dotar de más presupuesto y herramientas al área de Defensa de la Competencia, para mejorar el control sobre los mercados concentrados y evitar la cartelización.



Si se cumple con las recetas, el organismo augura que el PBI argentino podría crecer un 15% en 10 años. Parte de los pasos a seguir están presentes desde el día uno: ir retirando gradualmente los subsidios a la energía, racionalizar el empleo público y aplicar medidas adicionales de ahorro en las empresas estatales.



De manual. La OCDE acompaña la idea oficial de la baja gradual del impuesto provincial sobre los ingresos brutos y a las transacciones financieras, ampliando la base de los impuestos sobre el valor agregado y dotando de mayor progresividad a las contribuciones a la seguridad social para que sea adapten mejor y potencien el empleo formal. Asimismo, la actuación independiente del Banco Central a través de un mandato simple podría dotarlo de mayor eficacia, dice.



Además de una reforma educativa, la OCDE también promueve la ampliación del permiso de paternidad –tema que fue plasmado en una propuesta oficial para llevarla de dos a diez días–. El organismo también promueve una mayor representación de la mujer en todos los niveles del sector público y privado, algo que todavía está pendiente en el Gabinete presidencial.



Del otro lado, aboga por mantener subsidios para reducir la desigualdad y la pobreza, frenar la informalidad en el mercado laboral, que afecta a una tercera parte de la fuerza laboral y que se caracteriza por unos bajos salarios y ninguna protección laboral. El borrador de la reforma de trabajo, sin embargo, contempla nuevas formas de contratación para evitar la relación de dependencia lo que para los gremios apuntala la precarización.

Comentarios

Tucomentario

Nombre

Más de Política