Violó a un nene de 8 añitos y a su mamá: "me mandaron a hacer esto"

En un aberrante episodio, el depravado violó a una mujer en una casa e incluso llegó a abusar del hijo de ella, de sólo 8 años. El brutal ataque sucedió en enero último en un barrio de la zona sur de la ciudad deCórdoba.

El agresor fue condenado hace pocas horas a 12 años de prisión por la Cámara 3ª del Crimen de Córdoba en el marco de un juicio abreviado.

Jonathan Abel Zalazar (22), el violador, aceptó los cargos, pero no se mostró arrepentido ni pidió disculpas.

El fiscal de Cámara, Marcelo Hidalgo, pidió que se profundizara la investigación para confirmar si el ataque fue “por encargo” y, de ser así, “quién está detrás de todo”. Hay dos puntos centrales: primero, la frase que pronunció el delincuente cuando entró en la casa, y repitió luego. Segundo, la mujer y su hijo no residían allí. Precisamente, esa noche estuvieron en esa casa de forma eventual.

El episodio, que prácticamente no tiene antecedentes en la ciudad de Córdoba, sucedió el 22 de enero pasado alrededor de las 23.

Tras golpear la puerta de calle, Jonathan Zalazar fue a la parte trasera de la vivienda y logró ingresar por una puerta que da al patio.

Pensando que se trataba de un asalto domiciliario, la mujer se desesperó y le dijo que no tenía dinero ni nada para darle. Su esposo no se encontraba en la casa.

“Ya sé”, respondió el atacante. “A mí me mandaron para que te viole y te mate”, agregó, para luego comenzar a golpearla con trompadas, patadas, además de arrojarla varias veces contra una pared. Acto seguido, la sometió sexualmente.

Fue un feroz ataque de características indescriptibles.

De pronto, el depravado fue hasta el cuarto donde estaba el hijito de la mujer. Ese momento fue aprovechado por ella para encerrarse y pedir ayuda a los gritos y llamar con su celular a la Policía.

El violador abusó del niño de 8 años y regresó con un cuchillo al cuarto donde estaba la mujer, informó La Voz.

Al cabo de unos minutos arribaron efectivos policiales, que atraparon al delincuente cuando huía.