¿Cuál es el plan de Módica para mejorar la herencia que le dejó el ex DT Godoy?

Al plantel de Juventud se le fueron jugadores que, a juzgar por el rendimiento en cancha, no deberían resentir la estructura. Quienes dejaron la institución no tuvieron un peso gravitante en la campaña y así lo demuestran los minutos que jugaron.

Maxi Gómez apenas jugó 279 de los 1620 que disputó el equipo, contabilizando las 18 fechas que duró el torneo. Hugo González, quizás el más cuestionado de los refuerzos, estuvo en cancha nada más que 279 minutos. Emanuel Penissi alcanzó a jugar 144 minutos, mientras que Maxi Gómez se puso la camiseta sólo 290 minutos. De este grupo de jugadores que ya no están, el que más jugó fue Adrian Reta: 1080 minutos seguido por Hernán Lillo, con 982, y marcando dos goles, quizás esta arista fue la que justificó la titularidad de un volante que no le rindió lo que mostró en Zapla.

De los refuerzos que sumó Godoy, el que más jugó fue alguien que él no quería en el plantel: Agustín Bellone con 1415 minutos. ¿Por qué Godoy no lo quería a Bellone? “Nos dijo que no iba a sumar ningún jugador de Gimnasia y Tiro”, le confió un directivo a Tiro Libre.

Pablo Garnier, quien para Godoy arrancó siendo titular indiscutible, jugó 332 minutos, mientras que el Betito Acosta, que llegó de la mano de la dirigencia y no del entrenador, estuvo en cancha 323 minutos. De los que “no” quería el ex técnico, la Chancha Zárate jugó 893 minutos y marcó goles decisivos, como el empate ante el Albo en el clásico.

Ante este panorama, Gustavo Módica debe buscar el equilibrio porque está liberado del compromiso de hacer jugar porque él los trajo o por amistad. Esa es la ventaja de heredar un plantel y no de armarlo. Desde este lugar, el nuevo técnico deberá pulir todos los detalles para que el rendimiento mejore, porque el jugador tendrá la perspectiva que todos arrancan de cero porque saben, o intuye, que el DT actual no se casará con nadie y jugará el que mejor esté.