La continuidad de Godoy está sujeta a lo económico más que a lo deportivo

Los tiempos han cambiado, y lo que ayer se hacía por convicción hoy se lo realiza por el interés económico. Todo está sujeto al signo peso, y cuando se escucha decir a alguien que “me quedo porque tengo fuerzas para seguir”, habrá que revisar de dónde viene la frase.

El presidente de Juventud, Pepe Muratore, le dijo hace un tiempo a Tiro Libre: “Yo no me dejo llevar por los resultados, Juventud gana, pero para ser el equipo que todos pretendemos hace falta mucho trabajo”. El tiempo pasó, el equipo sigue sin desarrollar una idea de juego que lo identifique y esto, obviamente, es responsabilidad del técnico.

Más allá del “respaldo” que la dirigencia dice brindar al entrenador, se sabe que puertas adentro Godoy está cuestionado no solo por la dirigencia, sino también por un plantel que lo mira de reojo, sobre todo cuando declara. La última nota que le hicieron en Formosa, y de la cuál Tiro Libre se hico eco y se generó un gran revuelo interno, no cayeron bien en los jugadores, más allá que fue el propio técnico el que intentó bajarle los decibeles a sus propias palabras.

Por Juventud pasaron en los últimos años Pascutti, Roldán, J.J López, Ragusa, Riggio y ahora Godoy. Todos los anteriores se fueron con su sueldo pago, y en algunos casos, como el de Ragusa, cobró solo hasta el último día que trabajó, tal como lo marca la regla no escrita del vestuario.

El caso de Godoy es diferente. Según piensan los directivos, si es que rescinden con él querrá cobrar todo el contrato, caso contrario, iniciaría juicio, según la información que manejan en el club. Desde esta posición, la dirigencia no piensa despedirlo. Pero vamos a la otra parte: Godoy no tiene en sus planes renunciar, a pesar que el equipo no funciona, estuvo siete fechas sin lograr una victoria y viene de ganarle a un equipo muy flojo como Mandiyú, aunque vale aclarar que lo mismo iba a seguir en su cargo si el resultado hubiese sido adverso.

Planteadas así las cosas, en Juventud no piensan realizar cambio de timón, a no ser que sea el propio entrenador que de un paso al costado, por su continuidad no está sujeta a lo deportivo, si no al factor económico.