Federal A

Para cambiar este presente, Riggio tiene que meter mano en el equipo de cara al futuro

Gimnasia volvió a perder en Chaco 2 a 0. El técnico respetó hasta aquí la estructura que dejó su antecesor, Duilio Botella, pero en vistas que la cosa no mejora, ya es momento de patear el tablero.

El futbolero tiene incorporado en su chip de la memoria una celda en donde quedan almacenados los últimos minutos de un partido. Y es este comportamiento que lo hace olvidar todo lo demás y enfoca su visión en el tramo final de un encuentro, Apelando a este razonamiento, el hincha de Gimnasia (o gran parte de ellos) seguramente se habrá quedado con el lapso de partido donde el Albo puso a Chaco For Ever contra su arco, en una reacción que sólo fue una ráfaga.



Antes de eso, es decir los 80 minutos anteriores, Chaco demostró que, sin ser demasiado, fue más que un Gimnasia dubitativo, frío, sin reacción ni rebeldía para capear el temporal. Y en este mar de intrascendencia el local aprovechó para quedarse con un triunfo importante, mientras Gimnasia retornó a Salta con un bagaje de dudas.



Por el síndrome del técnico “recién llegado”, el Tano Riggio respetó hasta aquí la moldura que le dejó Botella. No hizo muchas modificaciones, y hasta respetó el dibujo táctico heredado. Pero ya está, todo eso le está costando al equipo paso para atrás, y si sigue con esta tendencia, el tobogán lo puede llevar a lugares indeseados.



Por eso llegó la hora de que Víctor Riggio meta mano en el equipo, y trate de llegarle con su discurso a un plantel que no levanta cabeza. Gimnasia no sólo pierde en el resultado, todavía debe estar buscando el alma batalladora que la dejó tendida en algún campo de juego y que le resulta difícil poder recuperarla.



No se está pidiendo mucho, al cabo, sólo se reclama algo que todo hombre debe tener, que es rebeldía. Y la rebeldía es entregar todo, porque según dicen los propios jugadores, “la entrega no se negocia”. Pues bien, llegó la hora de que este plantel demuestre que quiere pelear, que no le da lo mismo perder que ganar, y que sienten vergüenza cuando pierden de la manera que lo hicieron ante Chaco.

Comentarios

Tucomentario

Nombre

Más de Tiro Libre