Ni la Justicia, ni la política: las urnas castigan a los intendentes flojos de papeles y gestión

Pocos son los ejemplos que uno tiene de intendentes, funcionarios o políticos enjuiciados en Salta por casos de corrupción o irregularides durante su gestión. Los expedientes quedan en medio de telas arañas en algún cajón de una fiscalía local. Independiente del color político coyuntural, la clase política actúa de manera corporativa y se sostienen pese a las denuncias y algún posible embate de un Concejo Deliberante no comprado. Pero esta vez, al menos fueron castigados en las urnas.

Freddy Llaya fue el mariscal de la derrota del oficialismo provincial en el norte provincial en las elecciones del 13 de agosto. Apoyó a Zottos y Leavy lo triplicó en votos. También perdió en la categoría de Concejales en su Embarcación. 150 votos distanciaron a su candidato del primero. Lleva más de 16 años al frente de ese municipio del norte y tiene de costumbre aprobar el presupuesto de todos los años a libro cerrado. No existe órgano que lo controle. Se mueve como patrón de estancia.

Fernando Almeda se jugó y apostó por una candidatura testimonial para senador provincial. Quedó tercero cómodo y sin posibilidades alcanzar la banca en la Cámara Alta. Fue denunciado  en la Fiscalía Penal de Cafayate,  por los delitos de incumplimiento de los deberes de funcionario público y abuso de autoridad. También tiene denuncias en la Justicia Federal por supuesta malversación de fondos. Sin embargo, logró el apoyo de todo el arco del oficialsmo para su candidatura testimonial.

En Cerrillos, el candidato y miembro del gabinete de Yolanda Vega, Luis Albeza terminó sexto. Sufrió una paliza histórica en manos de "Puchito" Jorge quién trabaja para ser el próximo intendente. La intendenta es una de las caras nuevas en la política doméstica. Pero eso no garantiza nada. Su gestión es pobrísima y ya hay denuncias por irregularidades en sus cortos dos años al frente de esa comuna. 

El pueblo de Salvador Mazza castigó duramente en las urnas al actual intendente Rubén Méndez. Su candidata Rosana Andave ganó la interna del PJ pero quedó octava. De manera insólita, el intendente se quedarían sin representantes en el Concejo Deliberante. Ese cuerpo deliberativo aprobó la destitución del jefe comunal por irregularidades, malversación de fondos y violencia de género. El caso no avanza la Justicia.

Gestiones pobrísimas, irregularidades, nepotismo y aprietes a la prensa, son factores comunes en estas cuatro intendencias. Ahora se les sumó uno más: el duro revés que sufrieron en las urnas.

Con el correr de los años, el sistema democrático ha ido madurando y el voto se volvió en un arma más que importante. Falta y mucho pero es un avance que las urnas castiguen a los que la política y la justicia no lo hace. En buena hora.